La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) anunció que la vacuna contra COVID-19 desarrollada por Johnson & Johnson sólo deberá ser administrada a adultos que no puedan recibir otra o soliciten específicamente este biológico, debido al riesgo de que surjan coágulos sanguíneos raros, pero graves
Cabe recordar que, durante meses, las autoridades federales recomendaron que las personas reciban mejor las vacunas desarrolladas por Pfizer o Moderna, en lugar de la de J&J.
Por su parte, el doctor Peter Marks, jefe de vacunación de la FDA, expuso que la agencia decidió restringir la vacuna tras volver a examinar los datos sobre el riesgo de coágulos sanguíneos “potencialmente mortales”. Asimismo, detalló que sólo se han detectado en personas inoculadas con la de J&J.
Si existe una alternativa que parece ser igual de efectiva en prevenir desenlaces graves, a consecuencia de COVID-19, preferiríamos que la gente la eligieraPeter Marks
Los coágulos surgen en las primeras dos semanas después de recibir la inyección. Bajo este contexto, Peter Marks explicó que, quienes se pusieron la vacuna hace seis meses, pueden dormir tranquilos ya que “no es un problema”.
Estudios de seguimiento sobre J&J
La FDA autorizó la vacuna de J&J en febrero del año pasado para adultos de 18 años en adelante.
En un principio, era considerada una herramienta importante en la lucha contra la pandemia debido a que es de dosis única. Pero esa opción resultó ser menos efectiva que las dos dosis de las vacunas de Pfizer y Moderna.
Hemos sido cuidadosos en decir que, en comparación con ninguna vacuna, esta sigue siendo una mejor opciónPeter Marks
En diciembre, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomendaron dar prioridad a las de Pfizer y Moderna sobre la de J&J por sus problemas de seguridad. Antes de eso, las autoridades estadounidenses habían dado un trato similar a las tres vacunas porque cada una había demostrado ofrecer una fuerte protección.
No obstante, los estudios de seguimiento expusieron sistemáticamente una menor efectividad de la vacuna de J&J. Y, aunque los coágulos sanguíneos observados son poco frecuentes, siguen ocurriendo.
Científicos federales identificaron 60 casos, incluidos nueve que fueron letales, hasta mediados de marzo. Eso supone un caso de trombosis por cada 3.23 millones de dosis de la vacuna de J&J administradas, señaló la FDA este jueves.
En consecuencia, este biológico llevará una advertencia más severa sobre las posibles “consecuencias a largo plazo y debilitantes para la salud” del efecto secundario.
Con información de AP
MAEP