El expresidente de Honduras Juan Orlando Hernández aseguró ser inocente de tráfico de drogas al comparecer ante una tribunal en Nueva York, a más de dos semanas de ser extraditado.
En su primera audiencia en Estados Unidos se declaró “no culpable, señoría” de los delitos que se le imputan, como nexos con el narcotráfico, cómplice de una red de trasiego de cocaína, así como posesión y tráfico de armas desde Centroamérica a esta nación, mismos que habría cometido como jefe de Estado entre 2014 y hasta hace unos meses.
Vestido con el característico uniforme de prisión y en compañía de su abogado Raymond Colón, Hernández encaró su primera audiencia para defenderse de los cargos, momento en que el descartó tener relación con organizaciones criminales, luego de que se le vinculara con el Cártel de Sinaloa para financiar su campaña presidencial.
En tanto su defensor cuestionó las condiciones en que se encuentra en presión al recordar que llegó al país extraditado el pasado 21 de abril.
Tras su declaración, el juez estableció una próxima audiencia para septiembre próximo a fin de determinar su situación jurídica.
Casi a la par de su traslado al tribunal se reportó que el exdirector de la Policía hondureña Juan Carlos Bonilla fue extraditado a EU como cómplice de Hernández y encargado de supervisar el trasiego de drogas.
lemm.
