El autor del tiroteo en un hospital de Oklahoma adquirió un rifle horas antes de matar a cuatro personas en el lugar, entre ellas el cirujano que presuntamente lo operó, de acuerdo con el jefe de la Policía de Tulsa, Wendell Frankiln.
Un día después del crimen, el agresor de unos 40 años, identificado como Michael Louis presuntamente se suicidó, las autoridades indicaron que el sujeto iba detrás de un médico identificado como doctor Philips, a quien responsabilizaba de un dolor en la espalda, tras una cirugía.
Dicha información fue obtenida por una carta que llevaba el tirador. En ésta explicaba que desde la cirugía realizada el pasado 19 de mayo presentaba un dolor continuo, mismo que fue ignorado por el personal médico, según sus afirmaciones.
Además, se sabe que el hombre se habría comunicado en repetidas ocasiones al hospital en busca de una solución a un dolor que insistía fue provocado por el doctor Philips.
En torno al arma se detalló que adquirió una tipo AR-15, horas antes de presentarse en el edificio Natalie del centro médico; aunque inicialmente, autoridades reportaron que llevaba dos armas al irrumpir en la zona de consultorios, en un segundo piso.
Mientras continúan las investigaciones, se reveló que las otras tres víctimas asesinadas en el lugar fueron una doctora, una recepcionista y un paciente.
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