El gobierno de Estados Unidos advirtió que la amenaza de violencia en el país va al alza impulsada por extremistas que buscan replicar tiroteos masivos como el que dejó 19 niños muertos y dos maestras en una primaria en Uvalde en mayo pasado.
De acuerdo con un comunicado del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) se espera “un entorno de amenaza más dinámico” en la región ante el rechazo de políticas o cambios legislativos como la posible regulación de armas como rifles y cargadores de alta capacidad, tras decenas de atentados en varios estados, las cifras récord de cruces fronterizos, el debate de la Corte sobre el aborto y otros más, esto especialmente ante la cercanía de las elecciones intermedias que se llevarán a cabo en noviembre próximo".
La advertencia coincide con la reciente salida de una nueva caravana de indocumentados que se dirigen a la frontera sur del país, lo que recuerda el endurecimiento de medidas de contención en regiones como Texas, donde el gobernador Greg Abbott ha cuestionado la falta de apoyo del gobierno federal, pese al arribo masivo de ilegales.
Además se detalló una lista de zonas que podrían ser blanco de estos extremistas como escuelas, lugares de culto, transporte público y zonas de comunidades minoritarias, que han sido escenario de crímenes en Texas, Buffalo y Nueva York.
Cabe destacar que en el comunicado también se mencionan otros riesgos como grupos terroristas como Al Qaeda y el Estados Islámico, mismos que asegura buscan promover la división en la región.
lemm.