Ucrania está haciendo todo lo posible para salvar a tres ciudadanos extranjeros que se unieron a sus fuerzas militares y que fueron condenados a muerte por autoridades delegadas en el Donbás, dijo el sábado un legislador del Comité Parlamentario de Seguridad y Defensa.
Tras ser capturados, dos británicos y un marroquí fueron condenados este jueves por "actividades mercenarias" por un tribunal de la autoproclamada República Popular de Donetsk, cuyos líderes separatistas cuentan con el respaldo de Moscú.
"Tanto el Ministerio de Defensa como la Dirección General de Inteligencia, que se ocupa del intercambio de prisioneros, están tomando todas las medidas necesarias para garantizar que estos ciudadanos de estados extranjeros... se salven", aseguró el legislador Fedir Venislavskyi en la televisión nacional.
La viceprimera ministra Iryna Vereshchuk mencionó que creía que las autoridades separatistas finalmente actuarían de manera racional, "porque son muy conscientes de las implicaciones irreparables para ellos y para los rusos si toman medidas equivocadas contra estos tres de nuestros soldados".
"Algo me dice que, eventualmente, de una forma u otra, tarde o temprano, estos tres militares serán intercambiados (o regresarán a casa)", apuntó en una publicación en línea el sábado.
Gran Bretaña condenó la sentencia como una "violación flagrante" de la Convención de Ginebra, según la cual los prisioneros de guerra tienen derecho a la inmunidad de los combatientes y no deben ser procesados por participar en las hostilidades.
Ucrania, que ha desestimado el fallo del tribunal de Donetsk por carecer de autoridad, dice que los combatientes habían firmado contratos con las Fuerzas Armadas ucranianas.
Como resultado, "el estatus de prisioneros de guerra bajo el derecho internacional se aplica plenamente a ellos. Tomaremos todas las medidas para salvarlos", dijo el legislador Venislavskyi.
KEFS