El presidente Guillermo Lasso declaró el fin del estado de excepción que regía “por grave conmoción interna” en seis provincias del Ecuador.
La decisión se divulgó mientras la Asamblea Nacional conoce un pedido de destitución presidencial, tramitado por el bloque opositor Unión por la esperanza (Unes).
Mediante decreto ejecutivo el mandatario oficializó la medida con lo que “el gobierno nacional ratifica la disposición de garantizar la generación de espacios de paz, en los cuales los ecuatorianos puedan retomar paulatinamente sus actividades”, señaló un comunicado.
En el legislativo, continúa una sesión virtual en la que Unes, sustentado en los estados de excepción decretaros por el Ejecutivo “por grave conmoción interna” y que ya están insubsistentes, solicita se aplique el artículo 130 para la destitución presidencial, para lo cual requeriría 92 votos a favor.
La decisión de último momento del gobierno, prosigue a un primer acercamiento que se produjo horas antes entre el gobierno y la mayor organización indígena del Ecuador, y que fue confirmada por el presidente de la Asamblea Nacional, Virgilio Saquicela, quien informó sobre la eventual conformación de una comisión que viabilice el diálogo y ponga fin a un paro nacional que cumple su décimo tercer día.
La reunión se efectuó en iglesia Basílica, ubicada en el casco colonial de Quito, a la cual concurrió el presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE), Leonidas Iza, acompañado de otros dirigentes sociales, así como el ministro de Gobierno, Francisco Jiménez, el canciller, Juan Carlos Holguín, y otros funcionarios del régimen, informó Saquicela en declaraciones a la prensa.
“No ha habido compromiso alguno, sino simplemente la decisión de la CONAIE… de consultar a sus bases la designación de una comisión para el inicio de este diálogo”, aseguró Saquicela y ratificó que “de parte del gobierno ha habido la apertura correspondiente”.
El titular del legislativo indicó que se trata de “un avance”, pues “hemos pedido que se bajen las tensiones, que se bajen los enfrentamientos mientras se da este diálogo y se encuentra una solución”.
Previamente, los manifestantes que se alojan en la Universidad Central, en el centro norte de la capital, el presidente de la organización indígena ratificó que “la lucha es de resistencia” y negó que el paro haya terminado.
Lasso, un exbanquero de derecha, lleva poco más de un año en el poder, tras derrotar al candidato del correísmo Andrés Arauz en 2021.
LRL