La cifra de personas migrantes que murieron asfixiadas bajo las altas temperaturas, encerradas en la caja de un tráiler que fue abandonado en San Antonio, Texas, ascendió a 51, de las cuales 27 eran de origen mexicano.
En conferencia, la comisionada del Condado de Bexar, Rebeca Clay-Flores, precisó que 39 cuerpos son hombres y 12 mujeres, entre quienes al menos 34 ya fueron identificados y, algunos podrían haber tenido menos de 18 años.
Por otro lado, el cónsul de México en San Antonio, Rubén Minutti Zanatta, indicó que tres de las 13 personas que permanecen hospitalizadas, son mexicanas y precisó que se encuentran en estado crítico, con fallas neurológicas, renales, hepáticas y hemorragias internas. Añadió que ya contaban con 30 solicitudes de familias mexicanas para identificar a sus conocidos.
Además de mexicanos, entre los fallecidos también se ubicaron víctimas provenientes de Honduras y Guatemala, aunque no se precisó la cantidad; sin embargo, ayer por la mañana, el canciller Marcelo Ebrard refirió que se encontraron siete guatemaltecos y dos hondureños.
Tras sostener una llamada con el titular de la Fiscalía General de la República (FGR), Alejandro Gertz Manero, el funcionario indicó que se dispuso a abrir una carpeta de investigación por los hechos relacionados con el territorio mexicano, para lo cual equipo de la FGR se trasladó hasta San Antonio.
También indicó que acordó con el secretario de Seguridad de Estados Unidos, Alejandro Mayorkas, trabajar juntos para ubicar a los responsables de la tragedia, y que, junto al ministro de Exteriores de Guatemala, Mario Búcaro, apoyarán a los afectados.
En cuanto a las ciudades de origen de los connacionales, el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta, dio a conocer que dos de las víctimas residían en esta entidad, razón por la cual instruyó a brindar apoyo a las familias afectadas.
LRL