Casi dos semanas después Estados Unidos reavivó la polémica con China con un segundo viaje de congresistas a Taiwán, elevando el riesgo de que se repliquen los ejercicios militares por parte de Beijing contra la zona en cuestión, que vivió varios días de asedio aéreo y marítimo por sus intentos independentistas.
Los legisladores acudieron a la región a poco más de 10 días de que la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, desafiara al régimen de Xi Jinping y se reuniera con la presidenta de la isla Tsai-Ing wen.
En otra visita no anunciada, la delegación encabezada por el senador demócrata Ed Markey y líder del Subcomité de Relaciones Exteriores con Asia oriental reiteró su objetivo de retomar el diálogo que inició la segunda en la línea sucesora del gobierno de Joe Biden.
Destacó que negociarán en temas comerciales, inversiones, cambio climático, seguridad nacional y hasta reforzar el lazo con EU. Incluso, Reuters precisó que uno de los objetivos de este acercamiento es mejorar la cooperación económica y la producción de semiconductores, tema que se vio obstaculizado por los bloqueos para que Taiwán importe productos, pese a que es el principal generador de chips y microchips, indispensables para el sector tecnológico.
Sin embargo, el legislador, quien también viajó a Corea del Sur, no fue específico sobre cambios en torno al nexo, en medio de las múltiples advertencias de China, pues la potencia asiática considera que una relación diplomática no puede existir entre su territorio y su socio, pues Taiwán le pertenece bajo la política de “una sola China”.
Viajo a Taiwán con una delegación bipartidista del Congreso para reafirmar el apoyo de Estados Unidos a Taiwán y fomentar la estabilidad y la paz en el Estrecho de TaiwánEd Markey<br>Senador demócrata de Estados Unidos
En tanto, la representación estadounidense en Taipéi recalcó que con estas acciones EU “demuestra una vez más el firme apoyo del Congreso de Estados Unidos a Taiwán”.
Esto recuerda el compromiso de Pelosi con la líder taiwanesa de que no los abandonaría, especialmente ante el aumento de tensiones en el Estrecho de Taiwán, donde China desplegó buques de guerra y lanzó varios misiles para amedrentar a los líderes que buscan confirmar la independencia de la isla, que rechaza su supuesta adhesión a China.
Y desde la Casa Blanca se indicó que estos encuentros con Taiwán continuarán como en las últimas décadas.
El gobierno dejó en claro a China que dichas acciones no son recientes y, por tanto, no deberían representar ninguna amenaza, luego de que líderes de la isla compartieran fotografías y videos del recibimiento que dio a esta delegación.
Pese a la llegada de los cinco nuevos desafiantes, quienes se reunirán hoy con la líder Tsai-Ing wen, el gobierno de Xi Jinping no lanzó nuevas advertencias, hasta el momento, pero se anticipa una nueva escalada en las tensiones que provocaron choques entre Beijing y Wa-shington, pues éste último sostiene que defenderá la democracia en la región, mientras el régimen oriental expone ataques a este principio.
Y de acuerdo con agencias chinas la embajada de esa nación en Washington exhortó al Congreso de EU a respetar y actuar en consecuencia bajo la política de “una sola China”, al señalar que el propio Biden dijo que no intentan alterar esta medida, lo que anticiparía nuevos despliegues en aguas regionales.
Y como hace unas semanas, a estas tensiones se sumó Japón de manera indirecta, pues a unos días de que acusara que varios de los proyectiles lanzados por China cayeron en sus aguas, ahora acusó a la potencia asiática de invadir de nuevo su territorio.
Líderes de Tokio señalaron que en medio de estas nuevas tensiones la Guardia Costera detectó la incursión de al menos dos buques chinos en sus aguas, el segundo incidente en menos de un mes.
Y sin anticipar si prepara una sanción, busca calmar las diferencias con el régimen de Xi al recordar que las islas del archipiélago en cuestión y por las que atravesó esa embarcación son suyas, pese a que China también intenta apoderarse de éstas como en el caso de Taiwán.