El gobierno de Vladimir Putin rechazó cualquier intento de Occidente de imponer topes al costo de los energéticos y advirtió a la Unión Europea (UE) que acciones peligrosas sólo conducen a un escenario sin recursos.
A unos días de suspender el suministro del gasoducto Nord Stream 1, el líder del Kremlin aseveró en el VII Foro Económico Oriental que Rusia está lista para reanudar operaciones, tildando de “tontería” que cierren a propósito la infraestructura, pero minutos después sentenció que si sus socios afectan sus intereses no les suministrará “ni gas, ni petróleo ni carbón”.
Putin sostuvo que cualquier violación a los compromisos contractuales establecidos obligará a su régimen a cortar todo comercio energético, mientras esos países buscan alternativas por temor a quedarse sin electricidad o calefacción para este invierno.
E insistió que seguir con hostilidades, en referencia a las sanciones impuestas por la UE y el G-7 por la invasión, derivarán en una escalada sin precedentes, cuando se anticipa un frío invierno para la región por la crisis de recursos o la reducción de la calefacción para contener el consumo, pues sabe que estos países dependen de la materia prima rusa. Y dejó en claro que las restricciones no han logrado aislar económicamente a su país.
Ante lo que Gazprom, operadora del gasoducto que conecta con Alemania, recordó a los países del bloque de 27 países que en los últimos seis meses ya perdieron casi la mitad de suministros por las restricciones que ellos mismos impusieron en apoyo a Ucrania, hecho ante el que Putin enfatizó que Europa se arrinconó a sí misma, por el respaldo a las tropas ucranianas.
Sin embargo, líderes europeos insisten en poner límites al precio de los energéticos rusos luego de meses de advertencias del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, quien acusó al Kremlin de usar el gas como arma de guerra. Al respecto, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, refirió que deben cambiar su estrategia para dejar de financia la guerra, pues los recursos que pagan por energéticos son un impulso para el ejército ruso, mientras que la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) llamó a resistir el golpe energético, que considera es el costo de respaldar a una nación amenazada.
Si (condiciones) contradicen nuestros intereses económicos,Vladimir Putin, Presidente de Rusia
no suministraremos ni gas, ni petróleo, ni carbón...
Con ello aprieta acciones contra Europa y a la vez refuerza sus planes en territorio invadido, pues adelantó la fecha en que realizarán al menos dos referéndums para anexarse Jerson y Zaporiyia, como sus fuerzas lo hicieron con Crimea, hace una década.
El mandatario adelantó que en dos meses los residentes de estos territorios conquistados, clave por sus costas y albergar la principal planta nuclear, respectivamente, decidirán si quieren ser parte de la potencia, hecho que coincidirá con el Día de la Unidad de Rusia.
Por separado, el Partido Rusia Unida aseveró que en esa misma fecha podría realizarse la votación en Donetsk y Lugansk, que se han visto atrasadas, pese a que tienen prácticamene el control total del Donbás.
En tanto, el gobierno de Zelenski insistió en atender los llamados de seguridad en las instalaciones nucleares y hasta demandó urgentemente el ingreso de cascos azules de las Naciones Unidas ante el riesgo de que ocurra un desastre de grandes proporciones.
GB, POR PLAN PREVENTIVO
El nuevo gobierno británico contempla un proyecto para compensar la alzas en electricidad y calefacción para reducir el impacto económico.
En su primera presentación ante el Parlamento, la primera ministra, Liz Truss, señaló que su plan busca atenuar la crisis energética para “salvar el invierno” y ratificó que su gestión tendrá como tema prioritario la economía, afectada por las presiones rusas de tomar represalias contra quienes considera hostiles.
Y pese a las críticas, la excanciller rechazó las demandas del Partido Laborista y hasta de aliados conservadores para fijar nuevos impuestos a empresas petroleras, beneficiadas por la guerra, pues reiteró que no fijará más tasas que son contraproducentes en medio de una situación crítica. Y advirtió que aplicar estas acciones podría provocar que firmas nacionales y extranjeras dejen de invertir en la región.
DGM