La Organización Mundial de la Salud (OMS) y los Centros para el Control y Prevención de de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) respiratorias calificaron el sarampión como una “amenaza inminente”, mientras sigue la lucha contra virus como el COVID-19 y la viruela del mono.
De acuerdo con un informe difundido en Estados Unidos, el riesgo de contagio aumentó debido a que hasta 40 millones de niños a nivel mundial se quedaron sin vacunas contra el sarampión tan sólo durante 2021, en medio de la pandemia de SARS-CoV-2, lo que representa el nivel más bajo de inmunización en más de una década.
Tras estos resultados, ambos organismos sanitarios reconocieron que el sarampión se convierte en un virus potencialmente peligroso para la infancia, pues sólo 70 por ciento de los menores cuentan con esquema completo, dejando en riesgo al sector restante.
Al respecto, la directora de los CDC, Rochelle Walensky, dijo que las cifras actuales son “insuficientes y muestran el daño profundo que los sistemas de inmunización sufrieron durante la pandemia”.
Mientras que el encargado del organismo mundial, Tedros Adhanom Ghebreyesus, lamentó que mientras las dosis anti-Covid se desarrollaron en tiempo récord otras se perdieron, lo que reduce las probabilidades de salvar vidas, por lo que urgió a los gobiernos, según un comunicado, a recuperar los programas de vacunación, de lo contrario la situación podría ser crítica.
RFH