Luego de que el Congreso de Perú destituyó a Pedro Castillo como presidente del país, medios locales reportaron su detención cuando, supuestamente, se dirigía a la Embajada de México para pedir asilo político.
Medios de la nación andina informaron que el mandatario se encuentra bajo custodia policial en la Segunda Región Policía de Lima, minutos después de que salió del Palacio de Gobierno.
Dichas acciones se dan luego de que las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional rechazaran el llamado golpe de Estado al referir que las acciones de este miércoles del Ejecutivo van en contra del orden constitucional y no acatarán el más reciente mandato de Castillo Terrones.
Ambas corporaciones sostuvieron que no hay justificación para que el Ejecutivo cierre el Congreso y declare al país en Estado de excepción, y a través de un comunicado sentenciaron que lo hecho por Castillo es un acto que va contra el orden constitucional pues “constituye una infracción a la Constitución y genera el no acatamiento”.
Incluso, puntualizaron que la solución del Congreso sólo puede darse “si éste ha censurado o negado su confianza a dos Consejos de Ministros”, hecho que no ocurrió, pues es claro que respondió al plan por destituirlo, pues los opositores señalaron que el mandatario actuó, pues sabía que este tercer intento de votación sería el decisivo.
Pese a los planes del mandatario para bloquear el intento de destitución, el Congreso siguió con sus planes y con 101 votos respaldó la vacancia gubernamental y prevé que la vicepresidenta Dina Boluarte asuma el gobierno en reemplazo de quien es acusado de al menos seis delitos. Incluso, se reportó que la funcionaria ya fue citada para rendir protesta como nueva jefa de Estado.
CEHR