El empresario multimillonario y fundador de la empresa Citadel, Ken Griffin, hizo que Walt Disney World cerrara para que sus empleados pudieran disfrutar del parque con todos los gastos pagados.
De acuerdo con los informes, el empresario invitó a sus empleados y socios, incluidas sus respectivas familias, a un día de diversión en el parque temático, en especial en zona exclusiva en Epcot. Cerca de 10 mil personas fueron al parque, una cuarta parte del total eran niños.
Además de las vacaciones de fin de año, Griffin contrató a Coldplay para que actuara en un concierto privado para todos los invitados sin que estos pagaran ni un dólar por las entradas.
El itinerario del fin de semana inició con una noche exclusiva en Epcot, actividades y paseos temáticos centrados en el espacio y la tecnología, incluida una visita a la atracción de los Guardianes de la Galaxia.
Al día siguiente fue el concierto de Coldplay con participaciones especiales de Carly Rae Jepsen y el DJ Diplo.
Durante todo el año la empresa de Ken Griffin organizó otros festejos y vacaciones pagadas, incluida una celebración a lo grande de Halloween en el restaurante Cipriani de Nueva York, partidos de Wimbledon y la proyección especial de la película Black Panther: Wakanda Forever.
También ha dirigido más de $1500 millones de dólares a causas vinculadas con las artes, educación y la medicina.