Desde que se suscitaron los terremotos en Turquía y Siria, hemos visto una gran cantidad de imágenes en donde niños y niñas han sido rescatados con vida de entre los escombros. Hemos contado historias sobre aquellos pequeños que siguen hospitalizados sin ser todavía reconocidos por algún familiar, a quienes se les ha otorgado una etiqueta con la palabra "anónimos".
No todos han corrido con esa suerte. Decenas de niños y niñas ha fallecido bajo los escombros tanto en Turquía como en Siria, por lo que a iniciativa del fotógrafo Ogun Sever Okur, se realizó un homenaje a estos pequeños y pequeñas fallecidas tras estos siniestros.
Una foto que está recorriendo el mundo
Globos azules, rojos y rosados son los que han sido colocados por voluntarios en Turquía, para recordar a los niños y niñas fallecidos en los recientes terremotos que también azotaron a Siria. Este homenaje, denominado "Mi último regalo para los niños", se realizó específicamente en Hatay, en el sur turco, a iniciativa de Ogun Sever Okur, quien también es influencer.
Los voluntarios subieron por los escombros para atar estos globos en varillas y cables, los cuales sobresalen de los edificios destruidos. El autor explicó a la BBC los motivos por los que hizo esta puesta sobre los escombros en Turquía. "Seguimos dando obsequios a los niños en Hatay, pero queríamos cumpir nuestro último deber con estos ángeles, así que llevamos a cabo esta actividad con globos", refirió.
Luego de darse a conocer en redes sociales, Ogun Sever Okur dijo que no le resultó sencillo colocar cada uno de los globos de este homenaje. "Créanme que cada vez que atamos un nuevo globo, duele en el corazón", agregó.
Ya se han colocado más de mil 500 globos
Hasta el cierre de esta nota, se ataron entre mil y mil 500 globos y esperan todavía llegar a más lugares, hasta homenajear a todos los niños y niñas que murieron en los terremotos de Turquía y Siria. De acuerdo a la UNICEF, hasta el momento hay más de 4.6 millones de niñas, niños y adolescentes en edad escolar afectados por los terremotos. Su futuro, indican, depende en gran medida de la asistencia humanitaria.
Redacción por Laura Almaraz.