Reportan 9 decesos en Jerson y Leópolis

Rusia reactiva ofensiva masiva con 81 misiles

Lanza el mayor ataque en lo que va del año para demostrar a Occidente que aún tiene grandes reservas; afirma que medida responde a “acto terrorista” contra Briansk; planta nuclear de Zaporiyia se queda sin conexión

Residentes de Leópolis recogen escombros en uno de los edificios alcanzados por un misil, ayer. Foto: AP

El ejército ruso hizo alarde de que aún cuenta con grandes reservas de armamento ante las especulaciones de Occidente de que se queda sin éstas y lanzó el peor ataque masivo simultáneo en lo que va del año, como un mensaje a los defensores de que no se dará por vencido.

Fuerzas Armadas de Ucrania reportaron que desde la madrugada resonaron las sirenas en al menos 10 ciudades clave y al poco tiempo se detectó el disparo de más de 80 misiles, la mayoría de crucero, contra instalaciones energéticas y civiles, los principales blancos de los invasores desde que comenzó la guerra.

Tras varios meses de mantener al mínimo los bombardeos, al concentrarse por completo en la disputa en Donbás, los soldados de Moscú respondieron a las dudas de los aliados de Volodimir Zelenski con una de las mayores andanadas para derribar inmuebles y provocar nuevos apagones en la capital y en provincias principalmente al este, la región más conflictiva tras casi 370 días en guerra, estrategia con la que causó al menos nueve bajas civiles en Jerson (5) y Leópolis (4).

Tras esta embestida, los locales resaltaron que derribaron casi la tercera parte de los proyectiles del Kremlin en un ataque que el Ministerio de Defensa justificó como venganza por el ataque terrorista en Briansk de la semana pasada, donde supuestos militares ucranianos ejecutaron a un ruso y tomaron rehenes.

No obstante, pese a la respuesta defensiva varios misiles alcanzaron infraestructuras residenciales y energéticas para atemorizar de nuevo a la población con más heridos por los ataques que dejaron temporalmente sin electricidad a Kiev. Incluso, algunos locales señalaron que el objetivo era aumentar la devastación en zonas ocupadas en el pasado con miras a eliminar el rastro de sus crímenes, como se ha documentado en Mariupol.

Mientras que el presidente admitió que la situación más crítica por la falta de luz se registra en Járkov y Yitomir, pero recalcó que trabajan a marchas forzadas para recuperar el suministro y no dar ninguna ventaja a los enemigos, pues también hubo intermitencias en el servicio en otras zonas como Dnipro y Odesa.

Además, se reportó que la nueva ofensiva causó la desconexión total de la mayor planta nuclear Zaporiyia.

Dicha situación obligó a la operadora nacional a activar el “modo apagón”, tema en el que la Agencia Internacional de Energía Atómica (IAEA, por sus siglas en inglés) advirtió que se acaba la suerte, al reconocer que cualquier incidente podría provocar una amenaza nuclear, como expertos señalan desde, cuando Rusia tomó el complejo hace un año.