Una amiga de Audrey Hale, la mujer transgénero abatida en el tiroteo en una escuela de Nashville, reveló que recibió un mensaje en el que advertía de un posible peligro casi una hora antes del ataque escolar.
“Algo malo está por suceder”, fue uno de los llamativos mensajes que Audrey, quien se asumía como Aiden en redes sociales, envió a través de Instagram a una excompañera con quien presuntamente jugaba baloncesto, según medios de EU como NBC News, sin saber que éste sería la advertencia de un tiroteo masivo en The Covenant School.
La amiga que no fue identificada compartió la serie de mensajes inquietantes que recibió en lo que Audrey definió como “nota suicida”, lo que generó inquietud a la receptora, y de inmediato intentó comunicarse con ella o alguien de su familia, pues en el primero de estos mensajes Hale le dijo que planeaba morir ese día y que probablemente sabría de ella en las noticias, enfatizando en mayúsculas “esto no es una broma” y que su familia no sabía nada de lo que pretendía hacer, pues ya planeaba un tiroteo escolar en el que mató a tres niños y tres adultos antes de ser abatida por la policía que respondió en sólo 14 minutos.
En el intercambio de mensajes la amiga le hizo ver a Hale que tenía mucho por vivir, lo que hace suponer que sabría de sus problemas emocionales o mentales, pero Audrey respondió que quería morir y prácticamente ese paso era una necesidad.
La presunta tiradora destacó que decidió contactarla para despedirse, pues consideraba que era “la persona más hermosa que conoció” y quería que supiera antes que nadie que iba a morir aunque podrían verse en otra vida, pues incluso resaltó que “algún día tendría más sentido” lo que le decía en referencia a una supuesta “evidencia” que podría revelarse, hecho que ahora se relaciona con el manifiesto que la Policía de Nashville encontró entre las pertenencia de Hale, quien ayer asesinó a tres niños y a tres adultos en su antigua escuela.
Cabe destacar que las autoridades confirmaron, tras interrogar a los padres de la agresora, que ella estaba bajo tratamiento médico por presuntos problemas mentales y que se le encontraron siete armas, de las que sólo usó tres al interior del colegio, mientras ya se han difundido dos videos ligados al tiroteo uno de cómo Audrey ingresó al lugar y otro de las cámaras corporales de los oficiales que la abatieron.
FGR