El joven atleta Phil Dowdell, una de las cuatro víctimas mortales de un tiroteo en Alabama, Estados Unidos, arriesgó su vida al salvar a su hermana menor al escuchar los disparos durante la fiesta.
Alexis, quien celebraba su cumpleaños 16, relató a la cadena BBC que al iniciar la balacera su hermano, quien recientemente consiguió una beca para jugar como receptor en la Universidad Estatal de Jacksonville, corrió hacia a ella y la derribó para protegerla, un noble gesto en el que desafortunadamente perdió la vida.
De acuerdo con una publicación la cumpleañera recordó que su hermano la ayudó al ritmarla al suelo durante la fiesta en un salón de baile en Alabama, pero en la confusión entre los gritos y el caos en la escena ella logró esconderse, pero su hermano no.
Al volver mencionó que encontró a su hermano herido, pues fue alcanzado por los tiros, y se quedó con él en espera de la ayuda médica, pero desafortunadamente Phil falleció en sus brazos en su cumpleaños debido a la cantidad de sangre que perdió, hecho por el que dijo que su cumpleaños jamás volverá a ser lo mismo por la tragedia en la que perdió a su hermano.
Asimismo, la adolescente agregó que tienen muy presentes las últimas palabras que le mencionó a su hermano mayor, pues “le dije que se mantuviera fuerte”.
Por separado, su madre Allen comentó en entrevista con ese medio británico que ese día “me arrancaron un pedazo del corazón”, pues en vez de ir a a la graduación de su hijo, que estaba programada para mayo próximo, ahora deberá enterrar a su hijo.
En dicha escena fallecieron cuatro personas y 28 más resultaron heridas, en su mayoría adolescentes; sin embargo, hasta el momento las autoridades no han identificado al presunto responsable ni se ha revelado el motivo del ataque.
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