Dos adolescentes de 16 y 17 años fueron detenidos tras el fatal tiroteo en una fiesta de cumpleaños en Alabama que dejó cuatro muertos y 28 heridos, entre ellos el hermano de la festejada.
Los menores identificados como Travis y Ty Reik, respectivamente, serán acusados como adultos por homicidio imprudente, adelantaron autoridades locales a sólo cuatro días del ataque armado registrado en un salón de baile; autoridades recalcaron que harán lo posible para detener estos actos deliberados.
Incluso el sargento de la Agencia de Cumplimiento de la Ley en Alabama, Jeremy Burkett, enfatizó que actuarán con todo el peso de la ley contra aquellos que intenten alterar la tranquilidad en la entidad, pues advirtió a los criminales “cuando saquen un arma y empiecen a dispararle a la gente, los meteremos a la cárcel”. Y envió un mensaje a todas las víctimas y sus familias al sostener que todas obtendrán justicia.
Sin embargo, hasta el momento no se informó el motivo de los jóvenes para atentar contra la familia e invitados a la fiesta de “Dulces 16” y siguen las investigaciones para confirmar qué delitos imputarán a los jóvenes además de los cuatro homicidios, por lo que solicitaron apoyo a todos los testigos para aportar información sobre el tiroteo, uno de los que más víctimas ha dejado en el país desde que empezó el año.
Tampoco se reveló información de cómo obtuvieron las armas usadas durante el tiroteo del pasado 15 de abril en la región de Dadeville.
Sobre las víctimas, la Policía informó que al menos cinco de los lesionados siguen en estado crítico mientras la nación registra una acelerada alza de tiroteos masivos con hasta 165 en lo que va del 2023, de acuerdo con registros de la organización Gun Violence Archive.
AM
