El exvicepresidente estadounidense Mike Pence rindió declaración ante un gran jurado en Washington en torno a las acciones que derivaron en el asalto al Capitolio tras la elección del 2020, en medio de la carrera de Donald Trump por la nominación para regresar a la Casa Blanca.
Pese a que de último minuto el magnate intentó bloquear el citatorio de su número dos, el republicano y funcionario de más alto nivel que habla sobre la insurrección se presentó ante el Tribunal, donde permaneció siete horas, de acuerdo con información de Reuters.
Aunque no se reveló de qué temas habló o si implicó en irregularidades al exmandatario, se informó que buscaban detalles sobre conversaciones y posibles actos delictivos cometidos por su entonces jefe para anular su derrota presidencial y por la que acusó una conspiración y fraude en su contra al perder la reelección ante Joe Biden.
Los jaloneos para conocer su postura comenzaron en febrero pasado cuando medios de EU expusieron nuevas presiones contra el funcionario de más alto nivel de la última administración para presentar testimonio y pruebas contra el presidente acerca de sus intenciones para impedir la validación electoral
Sin embargo, tanto el convocado como el aludido presentaron recursos para evitar tal testimonio.
El primero alegó que estaba en el Congreso y no fue testigo de primera mano de las acciones de Trump previo a la insurrección del 6 de enero del 2021, aunque hace semanas adelantó que “diría la verdad”, según una entrevista televisiva.
En tanto, los abogados del exinquilino de la Casa Blanca, quien enfrenta otros procesos legales, se movilizaron para reclamar un supuesto privilegio confidencial para evitar que Mike Pence revelara conversaciones privadas que tuvo con el entonces Ejecutivo, en las que podría ligarlo con algún delito.
Esos argumentos no procedieron y un mes después citaron otra vez a declarar a Pence, como figura clave en torno a los posibles movimientos del líder republicano junto a sus aliados, incluso abogados, para desatar esa violencia.
Trump no desistió de su estrategia y otra vez se pronunció en contra del hecho sin resultados, pues el pasado 26 de abril un tribunal de apelaciones rechazó su recurso.
Y un día después, de manera sorpresiva, su exiliado respondió a las preguntas de un fiscal especial para dar luces sobre la presunta incitación en el Congreso ante el rechazo de Trump a reconocer la derrota ante Joe Biden.
Además, destaca que Pence, quien podría ser un factor importante en esta investigación, podría ser rival de Trump por la candidatura del Partido Republicano del próximo año para enfrentar a Joe Biden, quien esta misma semana confirmó que va por un segundo mandato para “terminar el trabajo”.
Y es que como vicepresidente aseguran que tiene información privilegiada en torno a las presuntas presiones que recibió del entonces mandatario y de éste contra el Departamento de Justicia y otros funcionarios para anular un supuesto proceso fraudulento, hecho que no acató Pence al criticar abiertamente la postura de quien perdió la elección, lo provocó que Donald Trump lo atacara directamente al ponerle un blanco en la espalda en 2021 ante los violentos que irrumpieron en el Capitolio al grito de “cuelguen a Pence”.
