Una nueva política antimigrante en Gran Bretaña desató críticas contra el gobierno luego de que se reportara que prohibirá que estudiantes extranjeros se trasladen con toda su familia, pues aprovechan para radicar en el país.
En su intento por controlar el aumento de la migración en la región ante fuertes críticas y presiones de la Unión Europea, la ministra del Interior y exaspirante a premier, Suella Braverman, confirmó los planes al justificar que se detectó un alza de 750 por ciento en las solicitudes de estudio en los últimos tres años.
Según datos de Londres éstas pasaron de 16 mil a 136 mil, en medio de las restricciones por la pandemia de Covid-19, lo que evidencia que tergiversan su pase individual, para facilitar la mudanza de sus padres, hermanos y más familiares.
Ante esta situación, la nación prevé aplicar un cerrojo sin afectar estudios de posgrado. Los cambios aplicarán a partir del 2024 al vigilar que esos ingresos no ocurran, pues las familias ven en esta vía una garantía para llegar a territorio europeo sin trámites extra.
Sin embargo, no se reveló de dónde provienen estos grupos ni si reducirán el número de beneficiarios.
La medida coincide con una investigación de la BCC que destapó un fraude a través de redes sociales para que ciudadanos británicos otorguen la nacionalidad a niños extranjeros al presentarlos como propios a cambio de grandes sumas de dinero.