Biden ve “progreso” por el “buen camino”

China y EU afinan cooperación para estabilizar relación bilateral

Se reúne Xi Jinping con el secretario de Estado socio, Antony Blinken; visitante define como prioridad la creación de un grupo para combatir el flujo de fentanilo que mata a miles en su país; fijan posiciones sobre Rusia y Taiwán

Antony Blinken (izq.), secretario de Estado de EU, posa junto al líder chino, Xi Jinping ,en el Salón del Pueblo de Beijing, ayer.
Antony Blinken (izq.), secretario de Estado de EU, posa junto al líder chino, Xi Jinping ,en el Salón del Pueblo de Beijing, ayer. Foto: AP

Las principales potencias del mundo, China y Estados Unidos, recalcaron su interés de disminuir el escenario conflictivo al coincidir en dar “estabilidad” a su relación bilateral y, aunque no hubo acuerdos, adelantaron un plan de cooperación para abordar retos globales como frenar el tráfico de fentanilo.

En una reunión de último minuto, el presidente chino, Xi Jinping, le externó al secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, su confianza en recuperar el respeto mutuo para mejorar el diálogo ante múltiples confrontaciones; acto que al ser fuera de agenda evidencia avances significativos, pues Global Times consideró que la recepción en el Salón del Pueblo de Beijing muestra que los diálogos previos fueron fructíferos.

Blinken aclaró ante el anfitrión que EU “no trata de contenerlos económicamente”, tras el encuentro de media hora, lapso menor que la conversación que sostuvo con su homólogo oriental, Qin Gang, y que calificó de “sincero y constructivo”.

Ambos sectores ven este acercamiento como positivo al reducir los malentendidos y percepciones erróneas de las que culpaban al otro, especialmente ante las profundas diferencias que los mantuvieron al margen este último año.

La delegación de Washington resumió esta gira como un “progreso” con la potencia asiática, pues además de rebajar el tono de sus intercambios y la amplia hospitalidad, abre las oportunidades para fortalecer la relación sin entorpecerse mutuamente.

Además de reunirse con Jinping y Gang, Blinken también conversó con el líder de la Oficina Central de Asuntos Exteriores del Partido Comunista, Wang Li, quien optó por inclinarse hacia la colaboración, y van por más reuniones, pues confían en fortalecer este lazo con el futuro viaje de Beijing a Washington, pese a la disparidad en asuntos internacionales, gracias a un trato más conciliador que se percibió tras el apretón de manos entre Jinping y Blinken.

Al respecto, el enviado de Biden insistió que uno de los objetivos del viaje fue plantear como “prioridad el tema de los opioides sintéticos y el fentanilo”, para abordar en conjunto lo que denominó como crisis y retos transnacionales.

“Acordamos explorar la creación de un grupo de trabajo o un esfuerzo conjunto para cerrar el flujo de precursores químicos”, informó ante la prensa al admitir que EU vive una situación crítica ante la creciente cifra de decesos por estos productos que llegan a través de México, principal causa de muerte en personas de entre 18 y 49 años.

Sin embargo, China no fijó una postura, pero el diplomático estadounidense insistió que las conversaciones de ayer y un día antes dejan entrever que “tenemos mucho más trabajo por hacer” al identificar amplias oportunidades, pese a que hace meses EU definió a Beijing como la principal amenaza mundial, por ser rivales económicos, pero un escenario en el que es posible resolver desacuerdos de manera pacífica.

Más tarde, el presidente Joe Biden resaltó el trabajo de Antony Blinken para acercar a las potencias.

Pese a que su vocera, Karine Jean-Pierre, evitó dar un posicionamiento, los reporteros le insistieron al demócrata una evaluación sobre la gira de su secretario antes de viajar a Londres. Y dijo que la situación actual muestra que “estamos en el camino correcto”, pues se hizo un buen trabajo, mientras que Blinken apuntó que se lograron los objetivos.

De manera simple inyecta la relación de confianza, igual que Xi, al dar un nuevo rostro a su relación sin desafíos, pues reconocieron que los acuerdos y diferencias no cambian su “vigorosa” competencia, en la que abordaron dudas en torno a la protección en temas de seguridad, tecnología y prácticas comerciales nocivas, que benefician al entorno global.

Por ello, los funcionarios aprovecharon para hablar de dos de los temas que más los han enfrentado en el último año: la guerra y Taiwán.

La visita explicó tras el intercambio que su socio se comprometió a no enviar armas a Rusia, pues la potencia asiática dio garantías de que no ha dado “ni proporcionará asistencia letal” al régimen que invadió Ucrania.

Pero solicitó a Beijing vigilar las operaciones de firmas privadas, para evitar acuerdos secretos entre el Kremlin, luego de que se destapara el uso de piezas provenientes de ésa y otras naciones en armas usadas para destruir la infraestructura de Kiev y atacar a civiles.

Blinken recordó que, pese a los rumores de un posible acuerdo por la relación de Jinping con el régimen de Vladimir Putin, no existe evidencia de momento de la supuesta ayuda letal para aumentar la capacidad militar de Moscú.

Por el contrario, dijo que Beijing recalcó su apertura para negociar la paz, pues aplaudió el esfuerzo para dialogar con las naciones enfrentadas.

Sobre Taiwán el canciller de Biden descartó fomentar la independencia de la isla, en respeto a la política de “una sola China”, pero dejó en claro que no permitirá cambios unilaterales, luego de los intentos del régimen chino de recuperar por la fuerza ese territorio.

Asimismo, admitió preocupación ante provocaciones en la zona y violaciones a derechos humanos de Beijing contra residentes de regiones críticos como Xinjiang, Tíbet y Hong Kong y restricciones de viaje sin motivo y hasta detenciones de connacionales, ante las que dijo no dudará en actuar.