Junio es el Mes del Orgullo, una temporada en la que se festejan la vida y vivencias de la gente LGBT+ y se denuncian las amenazas a los derechos civiles conquistados con gran esfuerzo.
En Estados Unidos, los festejos de este año tienen lugar cuando los legisladores de muchos estados tratan de prohibir espectáculos drag, limitar la atención médica de afirmación de género y poner límites a lo que pueden decir los docentes sobre sexualidad y género en el aula.
En Colorado, en noviembre, un hombre mató a tiros a cinco personas e hirió a varias más en un club gay. En Israel, Tel Aviv festejó el Mes del Orgullo por primera vez desde que asumió el gobierno de ultraderecha con un gabinete lleno de ministros anti-LGBTQ+.
Desde hace más de medio siglo, las marchas anuales han servido para reclamar medidas frente a problemas concretos, como la epidemia de sida y exigir la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo, además de efectuar festejos públicos.
En estos días, los festejos y eventos —con imágenes del arcoíris, símbolo de esperanza, unidad y diversidad de los LGBTQ+— se realizan en muchos lugares del mundo.
Síguenos también en Google News
Leo