La abuela del adolescente francés asesinado a tiros por un policía durante una parada de tráfico hizo un llamado a la calma el domingo mientras la nación enfrentaba la sexta noche consecutiva de disturbios.
La abuela de Nahel, de 17 años, identificada solo como Nadia, dijo en una entrevista telefónica con la cadena de noticias francesa BFM TV: “No rompan ventanas, autobuses ... escuelas. Queremos calmar las cosas”.
Dijo que estaba enojada con el oficial que mató a su nieto, pero no con la policía en general y expresó su fe en el sistema de justicia mientras Francia enfrenta su peor agitación social en años. Su nieto, identificado solo por su nombre de pila, fue enterrado el sábado.
La violencia parecía estar disminuyendo. Pero a medida que se acercaba una nueva noche, el Ministerio del Interior anunció que 45 mil policías se desplegarían nuevamente en las calles para contrarrestar violencia. Nahel es de ascendencia argelina y murió en el suburbio parisino de Nanterre.
El presidente Emmanuel Macron encabezó una reunión especial de seguridad el domingo por la noche y no estaba claro si haría comentarios públicos. Debido a la agitación, el mandatario retrasó la que habría sido la primera visita de Estado a Alemania de un presidente francés en 23 años y que iniciaría el domingo.
La policía dijo que realizó otros 719 arrestos el sábado por la noche, elevando el número total de personas detenidas a más de 3.000 luego de un despliegue masivo de seguridad. Cientos de policías y bomberos han resultado heridos en la violencia, aunque las autoridades no han dicho cuántos manifestantes resultaron heridos.
Las autoridades francesas se horrorizaron el domingo después de que un automóvil en llamas chocó contra la casa del alcalde de L’Hay-les-Roses. Varias comisarías y ayuntamientos han sido objeto de incendios o actos de vandalismo en los últimos días, pero un ataque tan personal a la casa de un alcalde es inusual.
El alcalde Vincent Jeanbrun dijo que su esposa y uno de sus hijos resultaron heridos por el ataque a la 1:30 a.m. mientras dormían y dijo que esto representaba una nueva etapa de “horror e ignominia” en los disturbios.
El fiscal regional Stephane Hardouin abrió una investigación por intento de asesinato y le dijo a la televisión francesa que una investigación preliminar sugiere que el automóvil estaba destinado a embestir la casa y prenderle fuego. Dijo que se encontró un acelerante de llamas en una botella en el auto.
Macron ha culpado a las redes sociales por alimentar la violencia. El ministro de Justicia advirtió que los jóvenes que compartan llamados a la violencia en Snapchat u otras aplicaciones podrían ser procesados.
El video del asesinato mostró a dos oficiales en la ventana del automóvil, uno con su arma apuntando al conductor. Mientras el adolescente avanzaba, el oficial disparó una vez a través del parabrisas. El oficial acusado de matar a Nahel recibió un cargo preliminar de homicidio voluntario.
Trece personas que no cumplieron con las paradas de tránsito fueron asesinadas a tiros por la policía francesa en 2022, y tres este año, lo que provocó demandas de mayor responsabilidad.
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Leo