El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, concluyó ayer en Helsinki su visita de cinco días en Europa, donde se reunió con los líderes de Finlandia, Suecia, Dinamarca, Islandia y Noruega, tras llegar directamente de la cumbre de la OTAN celebrada esta semana en Vilnius, Lituania, cuyo objetivo fue mostrar el aumento del poder y la influencia de la OTAN ante el expansionismo de Rusia.
En declaraciones durante su visita a Finlandia para darle la bienvenida como el miembro más reciente de la alianza, el mandatario dijo que la invasión rusa a Ucrania sólo ha fortalecido al bloque y aseguró que su país se mantendrá comprometido con la OTAN a pesar de los “elementos extremos” del Partido Republicano.
“Lo garantizo absolutamente”, dijo Biden en una conferencia de prensa, ante la inestabilidad política en Estados Unidos.
“Nadie puede garantizar el futuro, pero ésta es la mejor apuesta que cualquiera podría hacer”, agregó Biden, quien pertenece al Partido Demócrata y se postula para la reelección en 2024, frente a un expresidente Donald Trump que es el principal candidato de los republicanos.
En este sentido, el antecesor de Biden amenazó en el 2018 con sacar a Estados Unidos del bloque militar, a lo que Biden comentó que hubo un apoyo abrumador para la OTAN del pueblo estadounidense, del Congreso y de demócratas y republicanos, “a pesar del hecho de que hay algunos elementos extremos de un partido”, refiriéndose a estos últimos.
“Estoy diciendo, con toda la certeza con la que se puede decir de la política exterior estadounidense, que seguiremos conectados a la OTAN, principio, medio y fin. Somos una sociedad transatlántica”, enfatizó.
Además, el presidente Biden afirmó que el líder ruso Vladimir Putin “ya perdió la guerra” en Ucrania y que la actual contraofensiva de Kiev para reconquistar los territorios tomados por Moscú en casi 17 meses de guerra lo obligará a negociar.
“(Putin) podría poner fin a la guerra mañana, sólo tendría que decir: ‘Me detengo’. Pero no hay posibilidad de que gane la guerra en Ucrania. Ya la perdió”, declaró.
Previo a una reunión bilateral con el presidente finlandés, Sauli Niinisto, Biden también destacó a Finlandia como un “activo increíble” para el bloque militar y sostuvo que ambos países son más fuertes juntos.
“No creo que la OTAN haya sido nunca más fuerte. La visión del mundo que todos compartimos es un mundo más libre y más seguro”, afirmó el presidente de Estados Unidos.
Y añadió: “Tenemos los mismos valores y esto importa. Estamos reforzando la cooperación en materia de defensa para garantizar la protección de nuestros pueblos mientras modernizamos la Fuerza Aérea”.
Por su parte, Niinisto aseguró que el ingreso de Finlandia en la OTAN anunciaba “una nueva era en nuestra seguridad” y aplaudió a Biden por crear unidad en la cumbre de Vilnius, centrada en el apoyo a Ucrania.
La determinación de Finlandia de ingresar a la OTAN rompió con siete décadas de no alineamiento militar y duplicó aproximadamente la longitud de la frontera que el bloque comparte con Rusia.
Biden también vio con beneplácito la posible entrada de Suecia a la OTAN, nación que había solicitado su ingreso a la alianza junto con Finlandia, pero su candidatura se vio frenada por Turquía, que afirmó que el país nórdico está haciendo poco en contra de personas que el gobierno otomano encabezado por Recep Tayyip Erdogan considera terroristas. Sin embargo, Ankara retiró esta semana las objeciones a su petición.
Pese a la exigencia de Kiev de obtener una vía clara para su ingreso a la OTAN, Biden subrayó que los acuerdos con los países de la alianza respaldarían la seguridad a largo plazo de Ucrania, incluso sin una adhesión formal, e insistió en que Volodimir Zelenski “acabó muy contento”.
No obstante, aunque el presidente ucraniano describió el resultado de la cumbre en Vilnius como una “victoria significativa” para su país, manifestó su decepción porque Kiev no haya recibido una invitación directa para entrar a la OTAN.