El recuento electoral mantiene en incertidumbre a España, pues aunque la mayoría de encuestas adelantaban un triunfo amplio para los ultraderechistas del Partido Popular (PP), el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) del presidente Pedro Sánchez mantiene una reñida disputa desde que comenzó el recuento de votos.
Por momentos ambas fuerzas han superado el umbral de 130 escaños, que en cualquier caso los obligaría a hacer alianzas con otros partidos para asegurar el gobierno; pero con el pasar de las horas y de los resultados se van rebasando, lo que mantiene a los ciudadanos a la expectativa de si Sánchez recuperara el control tras el revés de mayo pasado o la ultraderecha retornará al poder, pues el PP podría aliarse con Vox para que haya un nuevo gobierno ultraconservador en el país desde la era de Francisco Franco, pero aún no es claro si alcanzarán los 176 escaños necesarios para gobernar.
De acuerdo con la actualización al rebasar 75 por ciento del recuento, la alianza PP-Vox alcanzaría 165 lugares en el Congreso sobre los 126 en solitario del PSOE, que de unirse a las otras fuerzas sí lograría el umbral de la mayoría absoluta, de acuerdo con esquemas que adelantan medios locales tras el cierre de las urnas en las que la participación apenas rebasó 50 por ciento, debido a la coincidencia del proceso con las vacaciones de verano.
Sin embargo, el cierre se vuelve más cardiaco con ligeros cambios que posicionan por momentos al PSOE en el poder y por momentos al PP, mientras que en las calles algunos simpatizantes de ambos sectores ya celebran en espera de la confirmación en favor de su partido.
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