La contaminación y deterioro mundial provocan que el planeta pierda poco a poco su resistencia al alcanzar un nivel de seguridad “fuera de control”.
La Tierra está al límite del “espacio operativo seguro para la humanidad” al retroceder en la mayoría de mediciones sobre su salud como el clima, la biodiversidad, la tierra, el agua potable, la contaminación y las “nuevas” sustancias químicas, según un informe científico publicado en la revista Science Advances.
Y alertan que además de éstos dos emás “están a punto de romperse”, en referencia a la contaminación del aire y la acidificación de los océanos.
Con esta evaluación, el director del Instituto de Investigación del Impacto Climático de Postdam, Johan Rockstrom, sentenció que el planeta, a quien define como el paciente, “está enfermo” en comparación con una análisis similar de 2015, lo que adelanta el destino que le depara a la población mundial, pues nos encontramos en un punto de inflexión “desastroso”.
Pues los especialistas coincidieron en que la destrucción mundial detonó que se rebasaran estas mediciones, alejando a la Tierra del estado seguro y estable que existía desde la última edad de hielo hace 10 mil años, según datos publicados por The Associated Press.
Sin embargo, los científicos resaltaron como al igual que en la lucha climática aún hay esperanza si se actúa, pues para revertir esta “enfermedad” se requiere limpiar las tierras y salvar los bosques, según simulaciones del equipo, contrario a la tala que prevalece en varias regiones, mientras decenas de naciones enfrentan severas consecuencias a causa de fenómenos climáticos, que cada vez son más devastadores.
Por ello, Rockstrom recomendó a los gobiernos y a la población eliminar gradualmente la quema de combustibles fósiles y acabar con la agricultura destructiva.