Retoma en 3 días dos aldeas

Ucrania da nuevo golpe y redobla recuperación

Tropas defensoras vuelven a colocar su bandera en un punto que estaba bajo control del enemigo ruso; el invasor despide a Jong-un, sin revelar detalles de un intercambio militar

Un militar ucraniano avanza a una nueva posición en la zona de Andrivka, territorio recuperado por los defensores el fin de semana. Foto: AP

Mientras el invasor intenta legalizar las anexiones en plena guerra, las fuerzas ucranianas muestran que su contraofensiva avanza al recuperar ahora Klishchivka, ubicada a menos de 10 kilómetros de Bajmut, el segundo frente rescatado en tres días.

El Ministerio de Defensa de Volodimir Zelenski confirmó el golpe al colocar tras varios meses otra vez su bandera como en Andrivka, pese a que el enemigo presumía controlarlas, lo que aumenta la esperanza de expulsar al ocupante y retomar cada parte que les han arrebatado.

“Ucrania siempre recupera lo suyo”, alardeó el jefe de la oficina presidencial, Andri Yermak, en un impulso a los defensores, quienes externaron su confianza en que la contraofensiva sigue firme para dar nuevos reveses a los invasores, como el perpetrado por la 80 Brigada de Asalto Aéreo. Y advirtieron a las tropas de Vladimir Putin que impedirán a toda costa que el Kremlin trate de recuperarlo, pese a los bombardeos.

Y es que los de Zelenski recalcaron que no se darán por vencidos y le mostrarán a Moscú que la recuperación territorial y protección de civiles son la prioridad, en medio de señales de Inteligencia de que el régimen ruso concentra hasta 50 mil efectivos en Bajmut.

Por lo que no descartan más combates cerca del que fue un bastión ruso, ante las ofensivas sangrientas del Grupo Wagner, pues se calcula que los rusos aún tienen un fuerte arsenal para intensificar los choques, con unos 400 tanques y sistemas de lanzamiento.

Dicha acción fue aplaudida por Estados Unidos al resaltar que, pese al presagio ruso, la contraofensiva de Kiev no ha fracasado. En declaraciones a CNN, el jefe del Estado Mayor, Mark Milley, resaltó un avance constante con importantes objetivos, pese a la lentitud inicial.

En tanto, Zelenski alista su viaje a Washington para reunirse con su homólogo Joe Biden y legisladores. Es probable que el próximo 21 de septiembre dé un mensaje en el Congreso para agradecer el respaldo a su principal proveedor de equipo militar en esta invasión.

Kim vuelve a Norcorea

Luego de una visita que se extendió por casi una semana, el líder Kim Jong-un retornó a su país mientras el mundo espera conocer los planes de cooperación militar con su homólogo ruso, Vladimir Putin.

Tras encender las alertas por el posible suministro armamentista, el asiático abordó el tren de vuelta, en sigilo igual que su salida de Pyongyang, pero sigue bajo la mira de varias potencias para actuar de inmediato si entrega provisiones.

Durante el viaje, los “camaradas” recorrieron el Cosmódromo en Vostochni, una base espacial rusa, y otras instalaciones militares para ver su equipo de gran potencias y cazas, generando gran especulación sobre el interés del visitante en tecnología para la fabricación de satélites y submarinos de propulsión nuclear, a cambio de presuntos misiles y municiones para las fuerzas rusas.

Sin embargo, ningún régimen ofreció detalles y sólo destacaron la cooperación bilateral, nexo comercial y económico e intercambios culturales, con la incógnita de qué llevará Putin a Pyongyang en la visita recíproca, de la que no hay fecha.

Al respecto, el embajador ruso en Norcorea, Alexander Matsegora, dijo a medios rusos que todo salió según lo planeado y todos los objetivos se implementaron plenamente, avivando la gran alianza militar entre éstos, aunque enfatizó que Kim, quien el último día se reunió con el ministro de Defensa ruso, Serguei Shoigu, elogió los protocolos de seguridad.