Grecia pide a los demás estados miembro de la Unión Europea que adopten un plan propuesto para sancionar a los países que se nieguen a aceptar a los migrantes deportados por el bloque.
Los acuerdos bilaterales existentes entre los miembros de la Unión Europea y terceros países para la devolución de migrantes han demostrado no ser eficaces, indicó Dimitris Kairidis, ministro griego de Asilo y Migración.
"Europa debe exigir que esos países reciban de vuelta a sus ciudadanos. De otra forma habría sanciones y no habría ayuda financiera. Europa tiene la autoridad para imponer su voluntad en este tema”, afirmó Kairidis en la televisora estatal el martes en la noche.
La propuesta de sanciones se está debatiendo en la última fase de la negociación para una nueva revisión de las normas migratorias del bloque, añadió el ministro. El fracaso en la aplicación de una política de deportaciones viable, alegó, “convertiría a Europa en un hazmerreír por su proceso de asilo”.
Grecia y la vecina Italia enfrentan actualmente un repunte en la llegada de migrantes que ha renovado la presión sobre Bruselas para cerrar el pacto migratorio.
Las autoridades dijeron que 88 migrantes procedentes de Irán, Irak y Afganistán — entre los que había 20 menores — fueron rescatados el miércoles de un barco en problemas ante las costas del Peloponeso, una región del sur del país, con la ayuda de un buque petrolero que pasaba por la zona.
Horas antes, 82 migrantes fueron rescatados en las inmediaciones de la cercana isla oriental de Symi.
DAN
