La situación que vive Medio Oriente puede provocar actos violentos en Estados Unidos, advirtió el director del Buró Federal de Investigación (FBI), Christopher Wray, luego de que naciones de Europa elevaran las alertas terroristas como Bélgica, Alemania y Francia.
Durante una comparecencia ante los Comités de Asuntos Gubernamentales y de Seguridad Social en el Senado admitió que en las últimas semanas “la amenaza terrorista ha aumentado” tras detectar advertencias extremistas, de las que no dio indicios frente a la guerra que emprendió Israel contra Hamas tras la invasión del pasado 7 de octubre.
Apuntó que es posible que ese peligro inspire ataques significativos, lo que pone bajo advertencia a la nación “como no hemos visto desde el Estado Islámico” ante actos potenciales de individuos o grupos por raza o religión como los complots de hace una década tras el ascenso de la agrupación extremista que ya derrotó la nación.
Sin embargo, Wray pidió no entrar en pánico sino atender y mejorar la respuesta ante esta situación.
Y recalcó ante legisladores la importancia de estar atentos a posibles agresiones contra judíos —sector que concentra 60 por ciento de crímenes de odio en el mundo—, musulmanes y árabes, acto que no sólo compete a EU sino a sus bases en el extranjero, pues recordó que algunos militares ya fueron atacados por milicias en Irak y Siria, acto al que respondió el Ministerio de Defensa de Joe Biden como franca señal de que no permitirán ninguna escalada, al tiempo que documentan ciberataques dirigidos a su infraestructura.
En coordinación sobre esta alerta, el secretario del Departamento de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, reiteró que monitorean amenazas como las registradas en escuelas para evitar actos antisemitas o de islamofobia al enfatizar que hay varios sectores en riesgo, a los que garantizó total vigilancia de actos posiblemente relacionados a la fe como el homicidio de un niño musulmán.
Dicho escenario además de sumarse a las alertas en Europa coincide con un nuevo incidente, pues ayer la Policía de Francia neutralizó de un disparó a una mujer que vestía una túnica como la comunidad musulmana y amenazó a pasajeros en una estación de trenes.
La sospechosa, de la que no se reveló identidad, amagó con perpetrar ataques terroristas al grito “Alá es grande”, lo que elevó alertas entre usuarios del transporte, quienes reportaron el hecho a servicios de emergencia. De inmediato las autoridades respondieron al desplegar a un equipo numeroso en la estación, mismo que intentó dialogar con la presunta agresora, quien rechazó los llamados a entregarse y finalmente fue derribada de un disparo.
De acuerdo con medios locales la mujer que fue hospitalizada es investigada por presuntas amenazas de muerte y justificar actos terroristas a unas semanas de que un joven extremista matara a un profesor en una escuela.