La Organización Mundial de la Salud (OMS) clasificó el martes la cepa de COVID-19 JN.1 como una "variante de interés", por ser una subvariante de Ómicron.
En tanto, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) señalaron que la subvariante JN.1 representa aproximadamente entre el 15% y el 29% de los casos en el país hasta el 8 de diciembre, según las últimas proyecciones de la agencia.
La subvariante JN.1 fue detectada en Estados Unidos en el mes de septiembre. Mientras que en China, la semana pasada se detectaron siete infecciones.
En México solo se tiene registro de un caso, por lo que las autoridades ya vigilan el comportamiento de esta variante.
“Sí la vamos a estar vigilando, pero para nada representa una alerta importante en un incremento de casos, pero estaremos vigilando”, aseguró el subsecretario de Salud, Ruy López Ridaura.
En se sentido no descartó la presencia de más casos en México, en congruencia con el análisis y el comportamiento que se ha visto en otros países.
¿'Pirola' es una amenaza para la salud pública?
La Organización Mundial de la Salud aseguró que la subvariante "Pirola" no supone una gran amenaza para la salud pública.
"Basándose en las pruebas disponibles, el mayor riesgo para la salud pública mundial que plantea el JN.1 se evalúa actualmente como bajo", indicó la OMS.
Actualmente no hay pruebas de que la JN.1 presente un mayor riesgo para la salud pública en relación con otras variantes y que una vacuna actualizada.
¿Cuáles son los síntomas de 'Pirola'?
Según los expertos en salud, la variante "Pirola" tiene la capacidad de transmitirse vía intestinal y aérea, pero no causa enfermedades graves.
Los síntomas que provoca no son tan diferentes. Estos incluyen:
- Dolor de garganta
- Congestión
- Estornudos
- Tos
- Dolor de cabeza fuerte
- Afonía
- Dolores musculares
- Pérdida de olfato
- Fiebre