Ecuador no cederá ni se doblegará ante terroristas, advirtió el presidente Daniel Noboa ante una guerra no sólo contra 20 mil integrantes del narcotráfico sino contra funcionarios que los protegen, al adelantar cambios en prisiones como la deportación de mil 500 presos colombianos ante el hacinamiento.
Tras la peor jornada violenta en su gestión, de apenas seis semanas, que ya dejó 14 muertos, 329 criminales arrestados y 139 funcionarios retenidos, el líder más joven en la historia de Quito sostuvo que habrá mano dura en un tímido llamado a la unidad para acabar con la época en que el crimen imponía su ley y Gobiernos temían asumir decisiones drásticas.
En entrevista con Radio Canela, asestó a esas organizaciones que se acabaron las medidas tibias, al reconocer que se requieren “huevos de avestruz y no de cartón”, pero sin abundar en el alcance del decreto de “conflicto armado interno”, pues sólo se hizo patente el uso de fuerza letal contra delincuentes.
Aunque garantizó la defensa del Estado de derecho, el mandatario elevó el tono contra quienes tratan de doblegar al país, al tiempo en que medios alertaron que Los Lobos pretendían hacer estallar bases policiales para infundir miedo.
Por ello, retó a los terroristas al afirmar que si fueran valientes pelearían de frente con el ejército, sector que custodia penales, hospitales que ya sólo atienden emergencias, medios de comunicación y hasta transporte público, principalmente en Guayaquil.
Pero las calles lucen desoladas, pues no hay clases, cerraron negocios y miles trabajaron a distancia, como en la pandemia de Covid-19, escenario que el secretario de Comunicación, Roberto Izureta, resumió como “relativa calma”, pues la mayoría de la gente se quedó en casa.
En las calles sólo se observan a militares a pie o a bordo de tanque.
Éstos detienen a sospechosos ante la severa contención para recuperar la paz y la seguridad como prometió el Ejecutivo.
Además de pedir identificaciones a peatones y conductores, exhortaron a algunos a desnudarse, actos que denunciaron residentes. El objetivo era corroborar si tenían tatuajes alusivos a las bandas más peligrosas en la nación como Los Choneros, ligados al Cártel de Sinaloa, en México, Los Tiguerones y Los Lobos, entre otras, lo que recuerda el severo régimen que impuso Nayib Bukele en El Salvador desde 2021.
Daniel Noboa también atizó a jueces y fiscales que facilitan la evasión de criminales con “fallos absurdos”, al advertir que si los respaldan serán considerados terroristas, hecho ante el que el Consejo de la Judicatura suspendió al magistrado Diego Poma, responsable del cambio de José Adolfo Macías, Fito, de Los Choneros, de La Roca a Guayaquil.
Pues exhibió que esos líderes salían de prisión cuando querían en gestiones previas. Pero también se lanzó contra Teleamazonas por su cobertura para “espectacularizar” la violencia.
Detalló que la nación cortó la señal de TC Televisión ante la irrupción terrorista, pero ése se enlazó “mágicamente” para mostrar escenas de los delincuentes que no pudieron enviar su mensaje, pues el ingeniero de audio apagó los micrófonos, de acuerdo con Associated Press.
En medio de la crisis, el jefe del Comando de las Fuerzas Armadas, Jaime Vela, confirmó que hubo cinco abatidos y en cuestión de horas se cuadruplicó la cifra de detenidos al pasar de 70 a más de 300, a quienes les decomisaron 61 armas, según el diario Primicias, mientras decenas siguen como rehenes, pero prometieron hacer lo imposible para su rescate.
En torno a los planes penitenciarios, Noboa apuntó que expulsarán a cientos de extranjeros. La medida comenzará con mil 498 colombianos para abordar la ola de violencia y reducir el hacinamiento, pues según medios locales albergan a 39 mil, aunque su capacidad es para 30 mil, y seguiría con Perú y Venezuela, pues 90 por ciento de la población extranjera corresponde a esas regiones.
Sin embargo, Bogotá adelantó que si Quito no actúa correctamente éstos quedarían libres. En respuesta a ese plan, el ministro de Defensa colombiano, Néstor Osuna, enfatizó que deben evaluar cada caso por separado y cumplir ciertos criterios, como de salud o por sus condenas; de lo contrario, al cruzar la frontera quedarán libres si no tienen cuentas pendientes en ese territorio.
Pero no es la única nación en alerta, pues Perú reforzó la seguridad en la frontera y abrió una investigación tras reportes de la Inteligencia vecina de que municiones y granadas usadas por terroristas que irrumpieron al canal de TV eran de las Fuerzas Armadas andinas, según los números de serie. Al respecto, el ministro de Defensa, Jorge Chávez, adelantó que harán una auditoría, pero reconoció que es imposible identificar desde cuándo pasó, pues fueron adquiridas desde 2016. Por separado, el primer ministro, Alberto Otárola, descartó el supuesto uso de fusiles y armas de su ejército.
En tanto, otras naciones recalcaron su respaldo al líder más joven en Ecuador, pues Estados Unidos dijo que podría enviar ayuda, al tiempo en que medios locales revelaron que la potencia frenó la emisión de visados en esa región.
AMLO condena actos vandálicos en Ecuador
El Presidente Andrés Manuel López Obrador reprobó las actitudes vandálicas de miembros del crimen organizado en Ecuador e hizo votos porque esta situación sea transitoria y se restablezca la paz, y aseguró que hasta el momento no hay reportes de mexicanos afectados por estos hechos violentos.
Desde Acapulco, Guerrero, el mandatario federal dio su total respaldo al pueblo y al gobierno de Ecuador en esta situación, en la cual se quiere imponer la violencia con el uso de la fuerza, en lo que no está de acuerdo México.
“En el caso de lo que está sucediendo en Ecuador, expresamos nuestra solidaridad, nuestro apoyo al pueblo de Ecuador, a su gobierno, y desde luego que reprobamos estas actitudes vandálicas, la violencia, el querer imponerse con el uso de la fuerza.
“No estamos nosotros de acuerdo con eso, apoyamos al pueblo y al gobierno de Ecuador en esta situación que yo espero sea transitoria, y que se restablezca la paz en el país hermano de Ecuador”, señaló.
La jornada violenta, que el martes dejó al menos 10 muertos en diversos actos delictivos, se originó tras los operativos en una cárcel de Guayaquil en busca de José Adolfo Macías, alias El Fito, líder de Los Choneros, una de las bandas criminales más peligrosas por presuntos vínculos con cárteles mexicanos.
López Obrador subrayó que “no tenemos información sobre mexicanos que estén afectados por estos enfrentamientos”. Indicó que la secretaria de Relaciones Exteriores, Alicia Bárcena, ha estado pendiente de lo ocurrido en ese país sudamericano y habrá información oportuna sobre la situación de violencia perpetrada por el crimen organizado.
“Deseamos de todo corazón que se recupere la paz y que se aleje la violencia”, expresó en la conferencia mañanera.
Al referirse a la crisis en el país sudamericano, el senador de Morena Ricardo Monreal advirtió sobre las acciones “narcoterroristas” y el poder criminal como la nueva amenaza para las democracias latinoamericanas.
En sus redes sociales, el expresidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Senado expresó su solidaridad con el pueblo de Ecuador, ante los hechos registrados, dijo, por la “embestida narcoterrorista”.
En un post acompañado por fotografías del ataque que sufrió este martes una televisora ecuatoriana, el político zacatecano se expresó por una cooperación regional para hacer frente a lo que consideró como una “fuerza trasnacional”.
“Mi solidaridad con las víctimas y el pueblo de Ecuador por la embestida narcoterrorista de ayer. El poder criminal es la nueva amenaza para las democracias y las soberanías latinoamericanas. Esta fuerza trasnacional debe ser enfrentada con la cooperación regional”, manifestó.
También se dio a conocer que la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) da puntual seguimiento a los acontecimientos de violencia en Ecuador, con el fin de garantizar la seguridad e integridad de los connacionales que viven o se encuentran en esa nación en condición de turistas.
Coincidió con el Presidente López Obrador en expresar su condena a la violencia ejercida por grupos de la delincuencia organizada, para trastocar la paz y seguridad de los ecuatorianos.
Crimen debe preocupar a la región: experto
Los sucesos en Ecuador no sólo deben preocupar a ese país, sino a toda Latinoamérica por el alto riesgo que existe de la expansión de los grupos de la delincuencia organizada, que al paso de los meses tiene mayor poder y control, aseguró Héctor Lerín Rueda, excónsul de México en Puerto Rico y exjefe de cancillería de la embajada mexicana en Nicaragua.
El experto dijo a La Razón que es sumamente preocupante la expansión de los cárteles mexicanos a Sudamérica, debido a que en México se les ha dejado crecer, lo que permite que puedan llegar a otros territorios a realizar sus actividades.
El diplomático sostuvo que México ahora exporta a América Latina narcotraficantes, en vez de productos, lo que hace una coalición “letal” con la droga que viene desde Colombia.
“Está muy mal lo que pasa en Ecuador, lo que debe preocupar a todos los países del continente y no sólo a Ecuador, pues es un fenómeno regional donde los cárteles mexicanos se asocian con las bandas de los países del sur, por ello, se puede estar conformando un bloque muy grande por contar con muchos recursos y capacidad de operación”, explicó.
Lerín Rueda señaló que las ramificaciones del Cártel de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación (CJNG) es una prueba de la falta de combate que se hace en México, pues aseguró que “ningún país solo puede combatir el tema, sino que debe ser un esfuerzo conjunto de manera regional”, ya que de manera aislada será muy difícil abatirlos.
El internacionalista mencionó que, de no combatirse a los grupos criminales de manera coordinada, se seguirán viendo situaciones como la ocurrida en Ecuador donde por varias horas se toma el control de ciudades enteras.
El martes, un grupo de criminales generó caos en diversos puntos de Guayaquil, Ecuador, obligando a las autoridades a operativos y mantener un Estado de excepción.
Más tarde, autoridades detuvieron al menos a 12 personas relacionadas con los hechos, mientras que comenzó a señalarse las escisiones de cárteles mexicanos hacia ese país, pues los nexos van desde compraventa de armas y drogas.
