El Gobierno de Alabama, Estados Unidos, implementó un nuevo método para ejecutar a reos luego de reportar problemas en el suministro de fármacos necesarios para la inyección letal, pero éste no se salva de las críticas al abrir una batalla legal.
La polémica se centra en que no hay antecedentes de uso en humanos, sólo con cerdos, y se trata de un método de asfixia o hipoxia a través de gas nitrógeno al privar a la víctima de todo oxígeno, pero de momento se desconoce cómo se aplicaría, pues se desconocen los detalles para obligarlo a aspirar esta sustancia.
Nuevo método de ejecución 'podría ser extremadamente dolorosa'
Por ello, líderes y organizaciones a nivel mundial como Naciones Unidas (ONU) exigieron detener el proceso inhumano programado para el próximo 25 de enero, al contradecir a las autoridades de Alabama, primera región conocida a nivel mundial en aplicarla, quienes sostienen que no es indoloro y se desconoce qué le puede provocar a la persona.
Amnistía Internacional (AI) abundó que esta nueva herramienta “podría ser extremadamente dolorosa”, lo que abre dudas de si se trata de un acto de tortura; mientras que la Coalición Mundial contra la Pena de Muerte exhibió que este proceso ha sido rechazado hasta por veterinarios en casos de sacrificio animal, pues prolonga el dolor de éstos.
En tanto, quien podría convertirse en la primera víctima Kennet Smith, denunció que lo usarán como conejillo de indias.
El hombre que cumple una condena por un homicidio por encargo en la década de los 80 y evadió la inyección letal, pues por más de cuatro horas no pudieron suministrarle ésta en las venas, rechazó el uso de este método al advertir, según medios locales, que corría el riesgo de sufrir un derrame cerebral o quedar en estado vegetal, esto luego de meses de promover la medida experimental, pues cambio de opinión luego de años de evitar repetidamente la pena de muerte, según fiscales del caso.
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