El expresidente estadounidense Donald Trump defendió nuevamente su supuesta inmunidad al presionar a la Suprema Corte a pronunciarse sobre el tema el mismo día en que rindió testimonio por un caso de difamación.
Horas antes de subir al estrado en Nueva York, el político de 77 años aprovechó los reflectores para ahondar en la supuesta protección que evitaría que pise la prisión en caso de ser declarado culpable en alguno de los cuatro juicios penales que enfrenta.
A través de su cuenta de Truth Social, como es usual, el líder republicano que ya ganó las dos primarias en Iowa y New Hampshire advirtió que todos los líderes que alcanzaron el máximo cargo en el país deben gozar completa y plenamente de ese privilegio, incluso si “cruzan la línea”, en un tímido reconocimiento de que su conducta de confrontación es considerada crítica.
Y advirtió que al no garantizar tal inmunidad “la autoridad y decisión de un presidente de Estados Unidos será despojada y desaparecerá”, al acentuar las consecuencias que traerá una acción que pretende castigarlo a él por su presunta instigación en el asalto al Capitolio tras perder las elecciones de 2020.
Con dicha postura retornó ayer al tribunal en Manhattan para confrontar las acusaciones de difamación y agresión sexual de la escritora E. Jean Carroll. En un testimonio que apenas duró cuatro minutos, el empresario se mantuvo en su papel frente a la denunciante al rechazar las imputaciones y reiterar que ni siquiera la conocía, luego de responder preguntas de su abogada.
Acto en el que fue reprendido y el juez Lewis Kaplan solicitó al jurado ignorar sus comentarios, pues el exlíder nuevamente se lanzó contra las supuestas falsedades de la escritora que en 2019 lo denunció por una agresión sexual ocurrida en los 90 acto al que el magnate respondió con una estrategia para arruinar su reputación y credibilidad al tacharla constantemente de “mentirosa”.
Incluso, en claro desafío al proceso, Donald Trump salió del recinto repitiendo la frase “esto no es Estados Unidos”, de acuerdo con medios presentes en el sala del Tribunal, lo que recuerda que su recurrente refutación a todas las acusaciones, que es víctima de una cacería de brujas para impedir su aspiración presidencial para retornar a la Casa Blanca.
Previamente, ese mismo día uno de sus exasesores fue sentenciado a prisión por desacato al incumplir citatorios del Comité Selecto del Congreso.
Medios locales reportaron que Peter Navarro, su exasistente en temas comerciales, pasará cuatro meses encerrado por rechazar reiteradamente los llamados de la Cámara de Representantes para testificar en torno a la insurrección del 6 de enero del 2021, caso por el que Trump enfrenta dos juicios por interferencia electoral. Además, se reveló que su exaliado pagará una multa de nueve mil dólares.