Israel califica diálogo de “constructivo”

Piden no quitar fondos ante intento de tregua

António Guterres, líder de la ONU, promete castigar al personal que colaboró con Hamas, pero sigue el freno a la ayuda; Francia lidera negociación para rescatar a 136 rehenes

Israelíes ven los rostros de víctimas de Hamas, ayer.
Israelíes ven los rostros de víctimas de Hamas, ayer. Foto: AP

Frente a una nueva ronda para negociar una tregua y liberar a 136 rehenes que hoy cumplen 115 días en Gaza, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) demandó al mundo levantar el castigo por el presunto apoyo de su personal a Hamas.

Luego de que varios países suspendieran la financiación a la Agencia para los Refugiados Palestinos en Oriente Próximo (UNRWA, por sus siglas en inglés) António Guterres, pidió no penalizar a millones de palestinos en riesgo y ayer prometió a procesar a empleados que facilitaron la invasión en Israel con tal de retomar las donaciones que lo sostienen.

“Cualquier trabajador implicado tendrá que rendir cuentas”, aseveró ante la falta de confianza, pues Gobiernos externaron su temor de que ese dinero sea usado con fines terroristas.

Incluso, el líder garantizó total transparencia y colaboración con Tel Aviv y la comunidad global al recodar que hay una revisión interna para detectar fallas en la agencia, mientras el comisionado de ésta, Philippe Lazzarini, reveló que ya identificaron y despidieron a nueve de los 12 supuestos cómplices que en vez de ayudar a gazatíes se unieron a criminales.

Sin embargo, no hay garantías de que los recursos vuelvan, por el contrario se agranda la lista de naciones críticas, pues Francia adelantó que congelará su pago, mientras que el Ministerio de Exteriores estonio, reveló que “no continuará financiando a la organización”.

Hecho ante el que Gobiernos árabes y de Medio Oriente, como Turquía, recriminaron el desprestigio a la ONU para limitar la ayuda humanitaria a Gaza, territorio que acumula más víctimas entre muertos, heridos y desplazados por los bombardeos que se concentran en Khan Younis, donde estiman que el ejército de Benjamin Netanyahu asuma el control total en días, pero éste también tiene en la mira a Hezbolá, por nuevas amenazas desde Líbano.

En medio de la polémica, Israel sigue abierto a un alto el fuego, pues confirmó que una cuarta nación se sumó como mediadora, luego de choques con Qatar, a la que culpó de retrasar la liberación de decenas de secuestrados.

Pese a ciertas “lagunas” importantes, como condiciones sobre una segunda etapa de entregas o retiro de soldados, la oficina del primer ministro calificó de “constructivo” el diálogo a puertas cerradas en Francia para avanzar hacia un acuerdo por hasta dos meses.

Incluso, se mostró optimista de alcanzar una resolución que acepten ambos sectores en el corto plazo para rescatar a civiles y militares que siguen en manos de terroristas desde el pasado 7 de octubre. Proceso en el que también participan Estados Unidos y Egipto.