Dos personas murieron después de que un jet privado intentó aterrizar de emergencia el viernes sobre la carretera interestatal 75 en el suroeste de Florida, donde chocó con un vehículo y provocó un embotellamiento en medio de una enorme columna de humo negro.
El aterrizaje forzoso ocurrió cerca de la salida Pine Ridge Road en el condado Collier, apenas al norte de donde la carretera gira hacia el este rumbo a Fort Lauderdale en una larga recta conocida como Alligator Alley.
Brianna Walker vio el ala del jet arrastrar al automóvil que iba frente al suyo y estrellarse contra el muro de contención.
“Sólo eran unos segundos los que nos separaban del coche que iba delante de nosotros”, señaló. “El ala pulverizó este mismo coche”.
Walker y su amigo vieron al avión momentos antes de que cayera sobre la carretera, lo que le permitió a su amigo hacerse a la orilla antes del choque.
“El avión pasó encima de nuestras cabezas por unas pulgadas”, agregó. “Giró abruptamente hacia la derecha y se patinó por la carretera”.
Walker dijo que entonces se produjo una explosión en el jet con un sonoro estruendo. Trozos de la aeronave yacían desperdigados sobre el asfalto.
“Se siente irreal, como si fuera una película”, declaró. “No nos morimos sólo por unos segundos”.
La Administración Federal de Aviación indicó que se trató de un jet Bombardier Challenger 600, y dijo que había 5 personas a bordo cuando ocurrió el choque aproximadamente a las 3:15 p.m.
La aeronave había despegado en un aeropuerto en la Universidad Estatal de Ohio en Columbus, Ohio, alrededor de la 1 de la tarde, y se tenía previsto que aterrizara en Naples aproximadamente a la hora en que ocurrió el choque, dijo Robin King, portavoz de la Autoridad Aeroportuaria de Naples.
Un piloto contactó a la torre de control solicitando un aterrizaje de emergencia, ya que los dos motores habían dejado de funcionar. La torre perdió contacto, y luego los trabajadores del aeropuerto vieron el humo desde la carretera a sólo unos kilómetros de allí.