Tras casi una semana de reclamos

Madre de Navalny exhibe amenazas

Lyudmila Navalnaya vio el cuerpo de su hijo bajo la advertencia de hacer un funeral en secreto o tomarán represalias contra ella o el cadáver

Vigilia en honor de Navalny en el consulado ruso en Nueva York, EU, ayer.
Vigilia en honor de Navalny en el consulado ruso en Nueva York, EU, ayer. Foto: Reuters

Tras casi una semana de reclamos, la madre de Alexei Navalny, Lyudmila Navalnaya, vio el cuerpo de su hijo bajo la advertencia de hacer un funeral en secreto o tomarán represalias contra ella o el cadáver.

“Me están chantajeando, poniéndome condiciones sobre dónde, cuándo y cómo enterrar a Alexei”, exhibió en un nuevo video al relatar que fue trasladada en sigilo a la morgue en donde retienen el cuerpo, pero sostuvo que no permitirá que el régimen le imponga la tumba.

Sin entrar en detalles sobre cómo lo vio, la mujer de 69 años explicó que la hicieron firmar un acta de defunción que indica que el mayor opositor de Vladimir Putin falleció “de causas naturales”, pese a que aún no se realiza la necropsia, lo que confirma el intento de ocultar el motivo del deceso tras un paseo en la colonia penal en la que pasó sus últimas semanas.

Por separado, el aliado de Navalny, Ivan Zhdanov, recriminó que en pleno duelo amaguen con “hacer algo con el cuerpo” o la intimiden diciendo que éste puede descomponerse y el diario Novaya Gazeta Europa abundó que le fijaron tres condiciones: viajar en un vuelo especial a Moscú sin hablar con nadie, estar acompañada de personal del Comité de Investigación y que el cuerpo se traslade hasta que se elija un cementerio, aunque el régimen ya rechazó el que pidió, presuntamente para evitar que sea un acto multitudinario como las protestas recientes por las que van más de 400 detenidos.

En tanto, siguen las muestras de pésame y solidaridad, pues ayer el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se reunió con la viuda de Navalny y su hija, Yulia y Daria Navalnaya, en San Francisco, a quienes les ratificó que impondrán sanciones a Rusia por el crimen.