La agencia climática de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) activó la “alerta roja” ante un alza sin precedentes de calor, luego de que el mundo hilara los perores 12 meses de temperaturas récord.
En un duro regaño a Gobiernos, expertos climáticos enfatizaron que los esfuerzos para revertir el cambio climático son insuficientes; muestra de ello es que cada vez el mundo está más cerca de los 1.5 grados centígrados que no deben superar, debido a los gases de efecto invernadero y el derretimiento glaciar que hicieron del último año el más cálido.
Según un informe de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), que cita a la agencia Copérnico, entre marzo de 2023 y febrero de 2024 se batieron todos los récords en la superficie y a nivel del mar, pues el planeta tuvo un promedio de 1.56 grados centígrados en comparación con la era preindustrial, catapultándolo como el más caluroso de la década y temen que la situación empeore
Por ello, la secretaria general del OMM, Celeste Saulo, hizo sonar la alerta para encarar el mayor “desafío histórico” para la humanidad, en otro intento de convocar a ciudadanos y naciones a corregir las acciones climáticas, pues es claro que con esta crisis se perdió “una generación de oportunidades”, en los que cada vez la ONU pinta un escenario más crítico.
Al respecto, el líder del organismo que engloba a los países, Antonio Guterres, explicó que éste es un nuevo grito de auxilio de la Tierra, al remarcar que la negativa a disminuir el uso de combustible fósiles los arrastró a un caos y al “borde del precipicio”.
Y lo peor, según expertos, es que sin medidas concretas los máximos en termómetros persistirán con un mayor daño a ecosistemas que detonará en fenómenos más intensos, inseguridad alimentaria, problemas de salud y desplazamientos, al arrastrar a la Tierra a una “fase de derretimiento”.
Quienes realizaron este reporte buscan acelerar la respuesta conjunta ante los peores niveles en 170 años, pues prevén que 2024 siga este curso.
Por ello, convocaron a la primera reunión desde la COP28, celebrada a finales del año pasad en Dubái; el objetivo, según la OMM, es llegar con pasos más firmes de cara al próximo encuentro mundial, especialmente en materia de financiación, pues recalcaron que son los países pobres los que menos recursos tienen para afrontar el problema, pero también los que más pagan por la contaminación de otros.
Además se recalcó que sin un impacto clave para matizar las olas de calor que afectan a naciones de todos los continentes y hasta han causado decesos, éstas serán cada vez más intensas y letales, igual que inundaciones, sequías, incendios forestales y hasta ciclones tropicales, generando preocupación entre la población.