Se lanza contra fiscal Karim Khan

Netanyahu niega temor a posible arresto

Acusa al abogado de La Haya de “demonizar” a Israel y dice que éste se convertirá en paria; confía en que aliados no acaten decisión de la CPI; su nación censura a otro medio

Voluntarios ayudan a evacuar a víctimas en un hospital en Gaza, ayer.
Voluntarios ayudan a evacuar a víctimas en un hospital en Gaza, ayer. Foto: Reuters

El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, descartó temor a ser detenido y ante la orden que giró la Corte Penal Internacional (CPI) en su contra exhortó a gobiernos aliados a boicotear el plan del tribunal de La Haya.

El líder que sigue firme en su ofensiva contra Hamas en Gaza aseveró en entrevista con el medio estadounidense ABC que no le preocupa salir del país, pues confía en que la comunidad internacional no tome en serio las acusaciones del fiscal Karim Khan en su contra y su ministro de Defensa, Yoav Gallant.

Tema al que respondieron socios como Estados Unidos y Reino Unido al cuestionar el poder de dicha Corte, mientras que Noruega admitió que está obligada a actuar, aunque no fijó su postura.

Ante ello, el premier se lanzó duramente contra el abogado al acusarlo de igualarlo con los terroristas en lo que consideró un golpe político.

Enfatizó que con esa estrategia Khan “demoniza” a su pueblo y su legítima defensa y también aviva el antisemitismo al recriminar las acusaciones; incluso, cuestionó si se hubiera actuado igual contra EU cuando la potencia emprendió una guerra contra Irak por los atentados del 11 de septiembre del 2021.

En franco desafío al tribunal con sede en Países Bajos, Netanyahu dijo que quien debería estar inquieto por su estatus es el fiscal, pues sentenció que se convertirá en paria, pues no descarta que éste arremeta y arrastre a más democracias al banquillo de La Haya.

Declaración que algunos interpretaron como una amenaza contra quien ordenó su arresto por presuntos crímenes de guerra como hambruna y ataques intencionales a civiles, en referencia a los palestinos ajenos a los terroristas.

Esto mientras su gobierno mantiene la ofensiva en varios puntos de Gaza, donde ayer eliminó a varios enemigos, pero también golpeó una zona civil. Ahí provocó la evacuación de decenas de pacientes en el hospital Kama Adwan, incluidos varios bebés.

En tanto, el abogado que ordenó la captura de Netanyahu, Gallant y tres mandos islámicos defendió su proceder al externar sus dudas de que ese Estado estuviera indagando posibles crímenes y recalcarle que no está exento de cumplir normas internacionales, en referencia a los golpes contra civiles e intentos por detener la ayuda humanitaria a millones desplazados, aunque Tel Avivi dijo que ya movilizó medio millón de toneladas de comida y medicinas.

Sin embargo, en esta lucha por desmantelar el último bastión terrorista, en Rafah, abrió un nuevo frente al decomisar cámaras a periodistas de la agencia estadounidense Associated Press.

Ese sector denunció que su equipo fue intervenido y se cortó su señal por supuestamente violar la ley contra la prensa extranjera al acusarla de suministrar material a la cadena Al Jazeera, que fue suspendida semanas antes. Y ante el escándalo y críticas, el Ministerio de Comunicaciones reviró y devolvió el material a ese medio sin dar más información.