Defiende acción con futuro en juego

Macron cree en ajuste; marchan contra ultras

Marine Le Pen, principal opositora, augura triunfo para que su mano derecha sea premier; manifestantes promueven bloque para cerrarle el paso a conservadores y al ala extrema

Disidentes protestan en varias ciudades del país contra grupos de extrema derecha, ayer, incluso sobre monumentos. Foto: Reuters

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, defendió la disolución de la Asamblea Nacional tras la sacudida ultraderechista y externó que el país elegirá lo mejor.

“Confío en la capacidad del pueblo de tomar la decisión más justa”, afirmó en redes sociales en su segundo mensaje tras la derrota parlamentaria regional al enfatizar que los comicios de junio y julio son un plan serio, en el que se determinará el futuro inmediato de la nación, incluso hasta de futuras generaciones.

Su declaración pareció un intento de despertar a la ciudadanía para respaldar el proyecto que lidera y minimizar las críticas de que quiere mayor notoriedad, pues apuntó que su única ambición “es ser útil al país que tanto amo”.

Destaca que el adelanto se da ante el riesgo de que grupos conservadores y ultranacionalistas sigan ganando terreno, ola que se ha extendido en gobiernos y ahora en escaños de la Unión Europea, luego de que Marine Le Pen, de la Agrupación Nacional, tomara las riendas en la representación legislativa gala al sumar más de 30 por ciento del voto.

Y la rival auguró que su fuerza ganará, al elevar la pugna política.

En medios de comunicación la opositora se dijo convencida de que replicarán el logro del fin de semana para cumplir “la política que desean los franceses” en referencia a supuestos ajustes para contener la migración; plan en el que el eurodiputado y mano derecha, Jordan Bardella, fue clave al atribuirle la victoria, por lo que ya lo postula a primer ministro para darle mayor batalla a Macron.

Mientras en París, la alcaldesa Anne Hidalgo tachó de “preocupante” la decisión de Emmanuel Macron debido a que casi coinciden los comicios con los Juegos Olímpicos de 2024.

En tanto, la prensa informó que ambos sectores comenzaron negociaciones con miras a conformar alianzas ya sea para cerrarle el paso a la ultraderecha o que ese sector se afiance, pero no hay nada garantizado, ni para los que se dicen favoritos, pues sondeos dicen que Le Pen no obtendría el control para doblegar al mandatario, quien mantiene una mayoría simple.

A ese choque político se suman las protestas de quienes no quieren que Francia se incline hacia la derecha.

Trabajadores y estudiantes marcharon en contra de movimientos de extrema derecha en ciudades francesas como París, Marsella, Lyon y Montpellier, entre otras, y demandaron crear un bloque como en años previos para frenar a líderes como Le Pen; también convocaron a nuevas movilizaciones durante el fin de semana luego de actos en los que disidentes se lanzaron contra fascistas con consignas como “jode…” y “Francia no es Bardella” y advertencias de que esos grupos sólo representan el racismo y políticas polémicas.