La líder opositora y ultranacionalista francesa, Marine Le Pen, suma apoyo para las elecciones legislativas, pues republicanos se acercan a su movimiento en busca de una alianza para vencer al presidente Emmanuel Macron.
El dirigente conservador, Eric Ciotti, adelantó negociaciones al revelar a la prensa que eso es lo que pide el pueblo luego de un resultado parlamentario europeo “tan derechista”, acto que respaldó horas después el líder y mano derecha de Le Pen, Jordan Bardella, a quien ya proponen como primer ministro y ayer ratificó que hay en marcha un acuerdo con decenas de diputados.
Sin embargo, no todos del bando republicano apoyan el plan que inclinaría a la nación a la extrema derecha.
Muestra de ello son las críticas que despertó y que algunos reconocieron incluso que han respaldado en el último año las iniciativas de Macron en la Asamblea Nacional, pese a que el líder galo ya no goza de la mayoría en la cámara baja desde los comicios de 2022.
En tanto, el gobierno busca convocar a sectores de izquierda y centro para evitar que la ultraderecha asuma el control parlamentario ante presiones y rumores que apuntan a una posible renuncia de Macron, quien de inmediato desmintió tal acción.
Acto que parece tener respuesta, pues políticos liberales piden cerrar filas para impedir que la formación de Marine Le Pen, Agrupación Nacional, gane y tenga la oportunidad de formar el primer gobierno de extrema derecha en Francia desde la Segunda Guerra Mundial.
En un comunicado ese grupo llamó a todas las fuerzas de izquierda a conformar un frente popular y luchar contra un proyecto que se caracteriza por el racismo y políticas antimigrantes; sin embargo, Marine Le Pen también se reunió con integrantes del sector republicanos para discutir la posibilidad de crear un bloque para garantizar su triunfo.
