El eurodiputado francés Jordan Bardella acaparó los reflectores tras las elecciones parlamentarias en la Unión Europea (UE), pues con el adelanto de comicios se alza como un importante líder para arrebatar parte del control de la nación al presidente Emmanuel Macron.
Se trata de un joven político de 28 años afiliado al partido ultranacionalista Agrupación Nacional (RN, por sus siglas en inglés) y considerado mano derecha de la líder opositora, Marine Le Pen.
Pese a su corta edad éste lidera esa fuerza política desde 2022 a poco más de una década de afiliarse a ésta con sólo 16 años.
Y en 2019 se integró al Parlamento Europeo, sector en el que goza de importante presencia y liderazgo por lo que se le atribuyó el triunfo del fin de semana, pues la fuerza de extrema derecha se alzó como el partido en Francia con el mayor número de escaños en dicho recinto, al sumar 81 con más de 30 por ciento del voto.
Tras la victoria del pasado 9 de junio Jordan Bardella asumió el reto como el líder de los eurodiputados, como primero de esa lista legislativa, pero también a nivel nacional y aprovechar ese impulso para lanzarse contra el mandatario. En varias declaraciones tras el adelanto electoral anunciado por Macron dijo que la derrota que sufrió el mandatario el fin de semana evidencia un importante giro en el país al sostener que podría ser “el fin de un ciclo”, al anticipar que los comicios previstos para este mismo mes permitirán que la derecha asuma mayor poder en la nación.
Medios y analistas internacionales destacan que éste ha tenido su mayor auge entre la población joven a quienes atrae a través de redes sociales, principalmente TikTok, pues la ha sabido explotar a su favor.
Y es que destaca que tras la definición parlamentaria, la ultranacionalista Marine Le Pen dijo que éste podría convertirse en primer ministro, hecho que respaldaron integrantes del movimiento al destacar que Bardella es el perfil idóneo para llegar a Matignon, residencia oficial de un premier francés.
Además, el mismo Bardella confirmó acercamientos con los republicanos en Francia para armar una alianza conservadora para garantizar su triunfo, pues sondeos apuntan que por si sola su fuerza podría ganar, pero no aseguraría una mayoría; por lo que Macron no tiene perdido en una acción que algunos calificaron como arriesgada y en la que ahora el líder galo busca apoyos de otras fuerzas para seguir con el control y evitar que los extremos tomen matos control, ya sea de derecha o izquierda.
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