El huracán Ernesto, ahora clasificado como categoría 1, tocó tierra en las Bermudas a primera hora del sábado, amenazando con fuertes vientos, marejadas ciclónicas peligrosas e inundaciones potencialmente mortales.
Aunque ha mostrado signos de debilitamiento en su aproximación al territorio insular británico, Ernesto sigue siendo una amenaza significativa para los 64 mil habitantes del archipiélago.
El Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Estados Unidos informó que Ernesto tenía vientos máximos sostenidos de 140 km/h a las 5 de la mañana hora local (0900 GMT), mientras que la tormenta se centraba sobre las Bermudas, situadas a más de 970 km de la costa de Carolina del Sur.
Se prevé que Ernesto se aleje lentamente de las Bermudas durante el sábado, moviéndose hacia el norte-noreste en una trayectoria que lo llevará cerca o al este de Terranova el lunes por la noche.
La marejada ciclónica provocada por Ernesto se espera que cause importantes inundaciones costeras en algunas partes de las Bermudas, con precipitaciones pronosticadas de hasta 225 mm.
A pesar del debilitamiento, el viernes Ernesto había sido clasificado como tormenta de categoría 2, y se esperaban pocos cambios en su fuerza actual durante el sábado. Sin embargo, es posible cierta reintensificación a finales del fin de semana antes de que comience a debilitarse el lunes.
Michael Weeks, ministro de Seguridad Nacional de las Bermudas, advirtió a la población sobre la seriedad de la tormenta. "Amigos, no se hagan ilusiones. Esta tormenta es de verdad", declaró Weeks el viernes. Personal de emergencia ha sido desplegado en zonas estratégicas del archipiélago para responder a cualquier eventualidad.
El impacto del huracán ya se ha sentido en la infraestructura local. El viernes por la tarde, los vientos de Ernesto dejaron sin electricidad a cinco mil 400 de los 36 mil clientes de Bermudas, según informó la compañía eléctrica BELCO.
Debido a la peligrosidad de las condiciones, BELCO ha retirado a sus equipos de reparación del campo, posponiendo los trabajos hasta que sea seguro reanudar las operaciones.
Las marejadas oceánicas generadas por Ernesto también afectan a partes de las Bermudas, las Bahamas y la costa este de Estados Unidos. En Nueva York, la oficina de parques de la ciudad y el Servicio Nacional de Parques han anunciado el cierre de todas las playas de los distritos de Brooklyn y Queens para los bañistas el sábado y el domingo.
El Servicio Meteorológico Nacional pronostica peligrosas corrientes de resaca y marejadas de hasta 2 metros, lo que ha llevado a las autoridades a tomar medidas preventivas.
La lenta velocidad de avance de Ernesto, desplazándose a 20 km/h, representa un desafío adicional, prolongando el impacto de la tormenta sobre las Bermudas. La combinación de fuertes vientos, intensas lluvias y peligrosas marejadas ciclónicas hace que las próximas horas sean críticas para la población del archipiélago.
Las autoridades instan a los residentes a mantenerse informados y seguir las recomendaciones de seguridad para minimizar los riesgos durante el paso del huracán.
Información de Reuters y Europa Press.
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