Venezuela aseveró que la oposición admitió su derrota al presumir un documento firmado por el líder disidente, Edmundo González, quien acusó que todo fue bajo coacción.
El líder de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, divulgó el papel con la rúbrica del excandidato presidencial asilado en España como una clara señal de que abandonó al pueblo y aceptó que ganó Nicolás Maduro.
Sin embargo, González Urrutia lo desmintió al tachar la acción de nula, pues el chavismo la consiguió por la fuerza, al relatar que él y la vicepresidenta Delcy Rodríguez prácticamente lo obligaron para salir del país, pues aclaró en video que “o firmaba o me atenía a las consecuencias”, luego de horas de “chantaje y presiones”.
Precisó que entendió que ante el riesgo de ser arrestado sería “más útil libre que encerrado”, pues sigue su lucha con María Corina Machado, ahora en el exterior para lograr que se respete la voluntad de un pueblo cansado del régimen.
Edmundo González añadió que lo filtrado a la prensa es un intento de apagar la esperanza, pero dijo que ni lo callarán ni traicionará al pueblo al retar al chavismo a mejor divulgar las actas electorales, acto que aún no tiene respuesta a casi dos meses de los comicios.
En tanto, ese régimen sigue con las disputas diplomáticas y ahora arremetió contra Argentina, como hizo con España.
La Fiscalía giró órdenes de arresto contra el presidente de ese país, Javier Milei, su hermana y secretaria presidencial, Karina, y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, por su presunta complicidad con Estados Unidos, al entregarle hace meses una aeronave venezolana retenida en Sudamérica. Incluso, al anunciar la medida, el fiscal, Tarek William Saab, tachó a Javier Milei de “un peligro brutal”, acto que respondió el vocero argentino, Manuel Adorni, en redes con el mensaje “el nivel de delirio es astronómico”.
