El exgeneral del ejército nicaragüense Humberto Ortega Saavedra falleció a los 77 años bajo la persecución del régimen, a cargo de su hermano, el presidente Daniel Ortega.
Se reportó que el comandante sandinista murió la madrugada de este 30 de septiembre a causa de un infarto a cuatro meses de ser acorralado bajo la figura de casa por cárcel, periodo en el que su salud empeoró, pues fue hospitalizado desde junio pasado.
Horas antes de su deceso medios de la nación como El Confidencial y La Prensa detallaron, según informes médicos, que su condición se deterioró drásticamente durante su estancia en el hospital Militar de Managua al detallar que fue ingresado a terapia intensiva por cambios en su presión arterial y hasta estado de conciencia, dichos reportes hacía temer el fallecimiento de quien era un año mayor que el actual mandatario y quien lleva más de 17 años en el poder con reelecciones ilegales.
Y, finalmente, durante la madrugada de este lunes se reveló que sufrió un paro cardiorrespiratorio y aunque realizaron maniobras para reanimarlo por casi media hora el exintegrante de las Fuerzas Armadas no sobrevivió.
Cabe destacar que Humberto Ortega sufría de problemas cardiacos desde hace tiempo, pues fue operado a corazón abierto en el año 2000.
Pese a las diferencias que tuvo con el presidente y la vicepresidenta y primera dama, Rosario Murillo, por criticar su gestión y advertir que al morir su hermano debería haber elecciones en el país, el régimen resaltó la “aporte estratégica” del hombre que “transitó a otro plan de vida”, según un comunicado, al recordar su lucha sandinista para derrocar al dictador Anastacio Somoza.
Y el gobierno externó sus condolencias a los hijos de Humberto Ortega, pero no se pronunció en torno a si éste recibirá un funeral con honores como exmando militar; mientras que los deudos pidieron respeto a su luto sin abundar en cómo será despedido el exlíder sandinista.
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LMCT
