Policías de California impidieron un presunto intento de asesinato contra el expresidente y de nuevo contendiente a la Casa Blanca, Donald Trump, ahora en un mitin en Coachella el fin de semana.
Aunque los hechos ocurrieron el 12 de octubre, fue hasta ayer que el alguacil de Riverside, Chad Bianco, hizo público el arresto de Vem Miller, presunto simpatizante que pretendía ingresar al evento con pases preferentes falsos, una pistola, una escopeta y un cargador de alta capacidad, en la tercera amenaza al conservador en esta campaña, quien ya libró dos, el primero en julio cuando recibió un disparo en la oreja derecha y dos meses después el Servicio Secreto atrapó a un sospechoso antes de accionar su arma.
Según un comunicado en su sitio web, Chad Bianco dijo que la medida se logró en un puesto de control en el perímetro asegurado, lo que no afectó la seguridad del político. Y horas después elogió ante un medio en California que “probablemente detuvimos otro intento de asesinato”, al reconocer el esfuerzo de su equipo y que no creyó que se repetiría un riesgo así a escasas semanas de la elección en la que el magnate enfrenta a la vicepresidenta, Kamala Harris, aún con empate técnico, según las encuestas.
Además, el Servicio Secreto notificó que tuvo conocimiento de estos hechos, mientras que medios locales reportaron que el acusado, quien contendió para el Congreso de Nevada en 2022, sólo pasó unas horas bajo custodia en el Centro de Detención John J. Benoit, pues salió bajo fianza, tras pagar cinco mil dólares (casi 100 mil pesos) según ABC7 y Reuters.
Al ser liberado, el residente de Las Vegas y seguidor conservador que ha sido captado en eventos partidistas tachó los cargos de posesión ilegal de armas de “tontería” y las autoridades no demostraron algún motivo; sin embargo, se filtró que deberá comparecer en unos meses.
Por separado, aliados de Donald Trump exigieron reforzar su seguridad, mientras que simpatizantes del líder cuestionaron el arresto del hombre de 49 años, pues éste acudía con regularidad a los mítines del aspirante a un segundo mandato, incluso Vem Miller documentó en Instagram su asistencia a la Convención Republicana de hace meses y fotos con políticos.
Pero hasta anoche el líder y presunto blanco no se pronunció sobre este riesgo, pese a que ha aprovechado incidentes previos para victimizarse. Y en un nuevo mitin redobló su postura antiinmigrante al prometer en Washington que contratará a 10 mil agentes fronterizos si gana el próximo 5 de noviembre en un claro desafío al gobierno actual, luego de que hace semanas usó el poder sobre su bancada en el Congreso para bloquear un plan federal en la materia.