Israel celebró el éxito de su plan militar contra Hezbolá al sostener que en esta guerra “hemos acabado con la cadena de mando superior” de esa milicia.
Al evaluar el escenario actual tras eliminar a figuras terroristas clave, el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, Herzi Halevi, destacó ante sus tropas los importantes pasos que mantienen, pues aseveró, de acuerdo con la prensa israelí, que están cerca de una conclusión definitiva en torno a los combates en Líbano, del otro lado de la frontera norte, al desmantelar parte esencial del rival.
Y mantiene la lucha tanto en Beirut como en Gaza, donde ayer mató a un comandante, identificado como presunto trabajador de la Agencia para los Refugiados en Palestina de las Naciones Unidas (UNRWA, por sus siglas en inglés).
Se trata de Muhammad Abu Attawi quien, según sobrevivientes y videos de cámaras corporales de los invasores, asesinó a casi una veintena de personas que huyeron del festival Nova, pues lanzó granadas a un refugio en el kibutz Re’im, sitio donde secuestró a siete víctimas, entre ellas un ciudadano israelí-estadoundiense, cuyo cuerpo fue recuperado en un operativo en septiembre pasado.
Y a la par de la acción militar, el gobierno de Benjamin Netanyahu trata de retomar las negociaciones por los rehenes, tal como sugirió Estados Unidos y exigen las familias afectadas. Se reportó que el líder del Mossad, David Barnea, viajará esta semana a Qatar para buscar retomar un acuerdo con Hamas, a más de una semana de eliminar a su líder, Yahya Sinwar.
