Con más de los votos electorales necesarios (270) y los siete estados clave, así como las virtuales mayorías en ambas Cámaras, Donald Trump allana el camino para un “poder sin límites”, como advirtió su oponente Kamala Harris, pues su retorno será con “carro completo”.
Ayer se definieron Arizona y Nevada, pese a una indefinición prolongada, éstos se sumaron a la bolsa del magnate para cerrar con los sufragios totales de 31 estados —incluyendo Florida donde reside actualmente— frente a 19 de la aspirante demócrata, quien ayer lo felicitó en privado en un acto que da señales de romper con la división que permea.
Y en la Cámara de Representantes —donde se renovaron 34 lugares— su bancada ratificó la mayoría con 208 asientos luego de arrebatarle cuatro a los liberales, mientras que en el Senado despojó a éstos del control al sumar tres escaños y llegar a 52, lo que a nivel interno incrementa la incertidumbre sobre la falta de obstáculos para implementar sus propuestas de campaña. No obstante, los internacionalistas Dora Isabel González y Rubén Ramos afirmaron a La Razón que ni ese “carro completo” indica que logrará aplicar en el corto plazo sus amenazas, pues muchas son parte de su característica demagogia.
Al respecto, Rubén Ramos precisó que la oposición lo vigilará de cerca y aun sin mayoría ésta “se va a oponer a escenarios que no benefician ni ahora ni a futuro”, así como los lobbys si sus planes interfieren con sus intereses.
Los académicos consultados refirieron que muchas de sus propuestas se quedarán en la conducta exorbitante que mantuvo en su primera gestión, como continuos amagos de ajustar el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), punto en el que si acaso conseguirá revisiones “minúsculas”, pues Dora Isabel González apuntó que sólo aprovechará sus amenazas como “moneda de cambio” para sacar alguna ventaja de dichos socios comerciales.
Coincidieron en que muchas de sus propuestas se quedarán sólo en el terreno de campaña como parte de su retórica, pues incluso temas migratorios que los ha repetido no llegarían al Congreso, pues lo ven como su “manera de contener a su electorado” al repetir lo que a éstos les gusta escuchar, de acuerdo con el profesor Rubén Ramos o para intimidar con posibles sanciones contra países relacionados con las olas migratorias.
Escenario en el que González Ayala anticipó un panorama de “claroscuros” en la relación México-EU como parte de su faramalla, luego de que hace días amagara con aranceles para contener la migración, mientras que su colega apuntó que las deportaciones masivas no se van a cumplir, pues no las hizo ni cuando gobernó por primera vez (2017-2021), además intimidar a este sector podría impactar en sus planes económicos al provocar crisis en zonas donde son mayoría si éstos se salen de ahí por el riesgo de ser detenidos, lo que recuerda que antier Arizona apoyó una ley que permite a policías detener a sospechosos de irrumpir ilegalmente.
Y en el terreno global los analistas también estiman un escenario de agitación luego de que éste prometiera acabar con las guerras en Ucrania y Medio Oriente.
En el primer conflicto dicen que se acercaría a su “amigo”, en referencia al régimen, para lograr una suspensión, pero con dos riesgos económicos: quitar fondos a Kiev para destinarlos a la seguridad fronteriza o bajar el financiamiento a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN); mientras que en el segundo en vez de lograr una reducción provocaría una escalada, debido a la cercanía con el premier Benjamin Netanyahu y su intento de trasladar la embajada a Jerusalén.
Y a meses de asumir su segundo mandato persiste la sombra de la venganza contra “enemigos” tras convertirse en el primer mandatario convicto en la nación, al ser hallado culpable de más de 30 cargos penales y con juicios pendientes ligados a conspiración electoral, la insurrección del 2021 y retener documentos confidenciales en Mar-a-Lago, donde ayer se movilizaron seguidores del Make America Great Again para celebrar su histórico retorno.
Y todo apunta a que esos casos quedarán en el olvido tras sellar su retorno al poder, esta vez con mayor popularidad que en 2017. Éstos se borrarían incluso antes del 20 de enero, cuando asumirá el poder, pues el Departamento de Justicia y el fiscal especial Jack Smith, a quien amenazó con despedir, evalúan cerrar los casos abiertos a días de que se celebre la audiencia para dictar sentencia por delitos cometidos en Nueva York a través de su empresa con tal de ocultar un escándalo sexual.
Medios NBC News y The Washington Post confirmaron que la fiscalía, a cargo de Merrick Garland, ya toma acción en la materia para diluir tales casos al reconocer que es prácticamente imposible concluirlos antes de enero, con lo que el único exmandatario “convicto” en la historia del país retornará al Despacho Oval como en 2017, aunque esta vez como el ejecutivo federal más longevo con 78 años siete meses, cinco mayor que cuando Joe Biden llegó en 2021.
Kamala admite derrota y junto a Biden aboga por transición pacífica
La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, reconoció ante su público la derrota frente al mandatario electo, Donald Trump, con el compromiso de continuar su lucha y abogar por una transición pacífica, como planteó el aún líder Joe Biden.
Luego de perder por 223 votos electorales contra 294 del magnate, la demócrata subió al escenario que la esperaba una noche antes en la Universidad Howard y admitió ante simpatizantes que el resultado del 5 de noviembre “no es lo que queríamos, no es por lo que luchamos ni por lo que votamos”, aunque se dijo orgullosa de un histórico esfuerzo con su equipo en una campaña de poco más de 100 días, luego de sustituir al candidato inicial como posible “salvadora”.
Tras una reflexión por la contienda que no resultó tan reñida al dar la victoria al rival en la madrugada, la abogada intentó clamar desde su alma mater la decepción y emociones visibles entre el público en torno al futuro al llamar a aceptar el resultado cuando se pierde, pues la continuidad no se consagró.
En un mensaje al oponente abrió la puerta a un proceso terso, para evitar más división en la potencia, lección que contrasta con la conducta del rival, quien hace cuatro años desconoció su derrota e incitó a simpatizantes a defender un supuesto triunfo al acusar un fraude; por ello, Kamala Harris, quien se declaró con el “corazón lleno”, ratificó su compromiso para la transición pacífica que merece la nación después de comunicarse con el conservador para felicitarlo.
Y aprovechó el escenario poselectoral para dar esperanza de que EU estará bien. La exfiscal aseguró que sin importar el partido en el poder el país brillará, al despejar las dudas sobre un futuro repetido ante el segundo mandato de un líder que para muchos representa un riesgo y ayer fue abucheado. Añadió que ante una “era oscura”, pronosticando cómo serían los próximos cuatro años, es cuando se ven las estrellas, al citar un adagio y contrastar las declaraciones del opositor quien anticipó una “era dorada” para EU.
La número dos instó a los jóvenes a no desistir de su lucha y prioridades. Instó a quienes acudieron al campus a defender los valores, la democracia, la libertad y la justicia, en franca alusión al magnate, al convocarlos a usar ese coraje como inspiración, pues refrendó que desde el poder u otra posición respaldará los derechos de la población al hablar del aborto y el derecho a decidir sobre su cuerpo.
Y ante la euforia de un público que la vitoreó, pese a la desilusión, la mujer de 60 años ofreció al republicano una transición pacífica, al tiempo que agradeció la confianza y respaldo de su equipo, de su esposo, Douglas Emhoff, y de la pareja presidencial, Joe y Jill Biden.
Gesto que tuvo respuesta cuando el ejecutivo federal la elogió como persona y por el duro esfuerzo electoral al declararse orgulloso de Kamala Harris y abundar en un comunicado que su “mejor decisión” fue tenerla como número dos por su brújula moral. Mientras que horas antes llamó al republicano para coordinar una reunión y dar el siguiente paso.
Más tarde Barack Obama aplaudió lo hecho por Kamala Harris y Tim Walz y felicitó a la fórmula Donald Trump-JD Vance, a la que pidió aceptar la transferencia pacífica, “piedra angular” de EU, como lo dijeran públicamente los actuales líderes en calidad de virtual oposición.
Se prevé que el Jefe de Estado dé hoy un mensaje, mientras que horas después medios destacaron que a diferencia de su antecesor sí acudirá a la investidura y la número dos será quien se una a la certificación, dando otra lección al magnate de lo que debió hacer en 2020.
Y no fueron los únicos que destacaron la campaña que dio esperanza; el líder del Senado, Chuck Schumer, dijo que su inspiración perdurará en la nación, y que la exlíder de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi consideró a la fórmula demócrata una “fuerza clave” a futuro.
Alertan más poder de Trump contra éxodos
México se enfrentará a un Donald Trump “remasterizado, más grosero y agresivo”, pero con más poder que en su primer mandato, pues tiene mayoría en las cámaras y apoyo de los jueces para aplicar con más facilidad sus iniciativas en contra de los migrantes irregulares, aseguró la directora de la iniciativa Agenda Migrante, Eunice Rendón.
“Es un riesgo y un foco rojo que México debe tener en cuenta. Otro tema es que no puede hacer deportaciones masivas de la noche a la mañana porque, además, tiene costos; más bien hará algo simbólico para manejar una comunicación que demuestre a la gente que sí cumplió sus promesas; sin embargo, sí va a tomar algunas medidas, como cierres de fronteras y amagar con acciones escandalosas”, explicó.
En entrevista con La Razón, la experta en migración y seguridad mencionó que anteriormente lo frenaron las cortes federales para el tema migratorio; sin embargo, ahora tiene mucho más aliados, lo que permitirá sacar adelante sus propuestas.
Mencionó que para Donald Trump será más difícil negociar o dialogar con la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, en comparación con la manera como lo hacía con Andrés Manuel López Obrador, por el que tenía cierta simpatía.
Además, adelantó que no sólo va a amenazar a México con el tema migratorio, sino con el tema de la seguridad y el crimen organizado y narcotráfico, ya que quiere denominar a los cárteles con estatus de terroristas para “poder meter mano” en temas mexicanos.
Por ello, sostuvo que México debe diseñar una estrategia de seguridad muy inteligente, ya que se requiere la colaboración con Estados Unidos, aunque hasta el momento la relación esté “muy lastimada”, además de que Trump no es institucional y da mensajes sorpresivos, aparte de lanzar insultos y amenazas.
Eunice Rendón mencionó que no se sabe si Trump suspenderá programas como el Título 42 o terminarían algunos como el mismo asilo tramitado a través de la aplicación CBP One, pero aseguró que México no debe aceptar nada sin que haya igualdad de condiciones, y para ese propósito, agregó que será muy importante la acción de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SER) y la del Instituto Nacional de Migración (INM).
Por separado, Irineo Mujica, director de la organización Pueblo sin Fronteras, dijo que México se enfrentará a un Trump “2.0” con todo el poder, y con la promesa de exterminar a la comunidad migrante, lo que significa una posible deportación de mexicanos de esa nación.
“Al ganar, promete muchas deportaciones; de por sí ya hay miles, ahora el problema se acreciente, porque toca a todos los migrantes. Por ello, México se va a volver a convertir en una cárcel”, advirtió.
El activista apuntó que se pueden repetir escenarios en los que la Guardia Nacional (GN) haga persecuciones contra los indocumentados, mientras que el Gobierno federal sigue sin tener un plan migratorio.
De esta manera, dijo que podrían regresar programas como Quédate en México o la separación de familias, pues aseguró que Trump viene por venganza contra la comunidad migrante. Además, señaló, México va a vender a la gente con tal de quitarse el problema.
“Ahora viene el verdadero infierno, y la gente que viene, va a tratar de correr a la frontera para ganarle al tiempo”, estimó.
En caravana, “aterrados” por su triunfo, dice ONG
Los miles de migrantes de Centroamérica, Sudamérica y el Caribe se encuentran “aterrados” por el triunfo de Donald Trump a la presidencia de EU, pues temen que se terminen los beneficios para quien desee llegar y entrar a ese país, aseguró el Centro de Dignificación Humana.
El titular de la organización, Luis García Villagrán, señaló que entre los miedos de los migrantes se encuentra el cierre de las fronteras, la deportación masiva y el término del asilo vía CBP One; además, comentó que “los dados están muy cargados por parte del Gobierno de México hacia Donald Trump”, pues la migración puede ser la moneda de cambio.
En entrevista con La Razón, Luis García Villagrán dijo que, desde este miércoles, los migrantes se han concentrado de manera masiva en el municipio de Arriaga, casi con colindancia con Oaxaca, pues planean juntarse todos para salir en un solo grupo hacia ese estado, después Veracruz y la Ciudad de México.
“Si no ocurre nada fuera de lo usual, la gente se va a reunir completamente en Arriaga y de ahí van a estar como un solo contingente. Ellos tratan de avanzar rápido porque están aterrados con el triunfo de Donald Trump”, explicó.
En tanto, las dos caravanas migrantes que salieron este martes de los municipios de Tuxtla Gutiérrez y Tapachula, Chiapas, siguen su avance hacia el centro del país y se espera que en 10 días se concentre un contingente masivo en Arriaga.
Los que salieron de Tapachula arribaron la mañana de este miércoles a Huixtla, con aproximadamente dos mil 500 migrantes; además, muchas se han adelantado y ya se encuentran entre los municipios de Mapastepec y Pijijiapan.
Los otros 500 que salieron de Tuxtla Gutiérrez están próximos a llegar a Arriaga, aunque en las últimas horas se les han unido más personas que se encontraban en el camino, por lo que estarían sumando unas mil 500, según reportes locales.
En este grupo fueron amenazados dos migrantes que lideran la caravana; uno de Colombia y otro de Honduras, por ello, salieron del éxodo y se fueron por su cuenta. De esta manera, desde el martes y hasta ayer han seguido saliendo de forma hormiga, para evitar más amenazas.