Aunque mandatarios lo consideran un riesgo en el escenario global, especialmente con dos guerra en curso, la mayoría destacó y celebró el histórico retorno de Donald Trump, pues muchos veían un mejor escenario de diálogo con él que con Kamala Harris.
Con la confirmación de su victoria frente a la vicepresidenta, varios líderes europeos lanzaron llamados de unidad y confianza sobre trabajar de manera conjunta y sin roces, proceso en el que algunos ya lo hicieron en 2017, como Emmanuel Macron (Francia) y Viktor Orbán (Hungría).
Y es que en ese continente amanecieron ya con el recuento mayoritario y coincidieron en medio de temores y advertencias, en refrendar alianzas y diálogos clave en temas de interés común con el magnate; asunto en el que el secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Mark Rutte, enfatizó que su prioridad a semanas de asumir tal alianza es reforzar la seguridad regional, misma que se ha visto amenazada por la invasión de Rusia, cuyo mandatario, Vladimir Putin, es considerado un “amigo” del republicano, quien no se pronunció en torno al resultado electoral en Occidente, pero funcionarios del régimen destacaron que está interesado en negociar de nuevo con él.
En dicho conflicto el líder de la resistencia, Volodimir Zelenski, ya tuvo su primera charla telefónica con Donald Trump y destacó que sostendrán negociaciones estrechas, pues podría ser clave para negociar el fin de la guerra, aunque no es claro que respalde las demandas de Kiev; mientras que el afín al ruso Viktor Orbán celebró airadamente en redes sociales la “remontada” del empresario luego de que las encuestas le daban ligera ventaja a nivel nacional a su oponente demócrata y actual número dos estadounidense.
En tanto, en América Latina la mayoría de voces se inclina por mantener “buenas relaciones” frente a las constantes amenazas de éste, como imponer aranceles o alguna otra restricción si no controlan la migración, como lanzó recientemente a México; algunos de los que se pronunciaron fueron Brasil y Argentina al tenderle la mano para un acercamiento, mientras que en Venezuela, que recientemente rompió lazos con el gobierno de Joe Biden, plantean un posible acercamiento tras esta tensión a unos meses de las elecciones, según declaraciones del canciller de Nicolás Maduro, Yván Gil.