Potencias y líderes del mundo impulsan un mayor financiamiento para ampliar el compromiso para revertir el cambio climático, durante el arranque de la cumbre COP29, que este año se celebra en Azerbaiyán.
La mayoría de gobiernos presentes coincidieron en la urgencia de redoblar la apuesta económica mundial en la materia y la cooperación entre naciones.
El objetivo es alcanzar hasta un billón de dólares anuales con miras a mitigar un problema que no cesa, por el contrario va en aumento, pues el secretario ejecutivo de las Naciones Unidas en la materia, Simon Stiell, advirtió que en esta lucha “ningún país es inmune”, en un último intento de promover planes en conjunto para minimizar el impacto del calentamiento global.
Y es que, pese a múltiples promesas y hasta amenazas de científicos por la inacción de años, cada día la crisis escala más.
Muestra de ello es que no logran frenar el calentamiento al rebasar por primera vez desde la era preindustrial 1.5 grados de temperatura, con lo que 2024 igual que el año pasado se anticipa a romper el récord como el “más caluroso”, como reveló la agencia europea Copernicus.
Por ello, activistas que se manifestaron ayer en la región y defensores ambientales exigen políticas más firmes y garantizar herramientas a países en desarrollo, los que sufren más las consecuencias, pese a que otros son los que más emisiones contaminantes registran. Y se teme un retroceso con la vuelta al poder de Donald Trump en Estados Unidos, quien desaira la existencia de esta crisis.