Estados Unidos amplió las sanciones contra el régimen de Nicolás Maduro a casi cuatro meses del fraude electoral, acto con el que reivindicó su reconocimiento al opositor Edmundo González como mandatario legítimo, lo que reviró Caracas al sentenciar que es una acción “desesperada” de un gobierno saliente.
Con esta contención, el Departamento del Tesoro de Joe Biden impuso restricciones contra más de una veintena de funcionarios y allegados al poder como cómplices de la represión persistente.
Entre quienes se quedan sin visa están varios militares acusados de implementar “las órdenes para reprimir a la sociedad en su esfuerzo por declarar fraudulentamente ganador” a Maduro. Y es que EU apuntó contra el líder del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), Alexis Rodríguez, viceministros de Defensa y comandantes, lo que recuerda que el mundo desconoció ese resultado tras anomalías expuestas por González Urrutia y María Corina Machado.
Equipo de Donald Trump es blanco de amenazas
Y es que son señalados por las detenciones arbitrarias durante y tras los comicios para tratar de silenciar a detractores, incluyendo menores de edad, para hacer que Maduro Moros se perpetúe en el poder mediante “tácticas represivas”.
Y destaca el nombre de Daniela Desiree Cabello, hija del número dos del chavismo y ministro del Interior, Diosdado Cabello, un golpe directo al régimen que respondió casi de inmediato. Éste se lanzó directamente contra Joe Biden y a través de la Cancillería sostuvo que la decisión es otro fallido intento de afectarlo, pues no es más que “un acto desesperado de un gobierno decadente y errático”, en clara alusión a los tropiezos del líder estadounidense y que impidieron que buscara la reelección al verse obligado a ceder la candidatura a media campaña.
Y asestó, en un comunicado, que las sanciones sólo buscan “ocultar su rotundo fracaso electoral”, pues la candidata de la Casa Blanca, Kamala Harris, fue derrotada por Donald Trump, quien asumirá en enero próximo casi en las mismas fechas en que está prevista la nueva investidura en Caracas, con miras a definir una nueva relación al recalcar que el triunfo de Nicolás Maduro es “irreversible” y “jamás podrán doblegarlo”.
Lo que recuerda que esta acción se da en el cierre de la gestión de Biden, quien justamente a menos de dos meses de entregar el poder busca atacar a sus rivales y reforzar a aliados, como el caso de las naciones en guerra, Ucrania e Israel, mismas a las que busca otorgar últimos insumos para defenderse de sus agresores.
Dicha información coincide con filtraciones de que Washington se dispone a facilitar el retorno del líder opositor exiliado para asumir el poder, según información obtenida por Efecto Cocuyo.