El expresidente Donald Trump enfrentará su sentencia relacionada con el caso de Stormy Daniels el próximo 10 de enero, apenas diez días antes de asumir nuevamente la presidencia de Estados Unidos, si bien se prevé que no se impondrá una pena de prisión.
La audiencia, presidida por el juez Juan Merchan en Nueva York, culmina meses de disputas legales y políticas en torno al caso de los pagos encubiertos realizados a la actriz de cine para adultos Stormy Daniels.
En mayo, un jurado declaró a Trump culpable de 34 cargos de falsificación de registros comerciales vinculados al pago de 130 mil dólares a Daniels antes de las elecciones de 2016. Este caso marcó un hito al convertir a Trump en el primer expresidente en ser condenado penalmente.
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Sin embargo, Merchan ha adelantado que no impondrá una pena de prisión, pues, asegura, considera que una “descarga incondicional” es la “solución más viable” para equilibrar las demandas de justicia con las circunstancias únicas de un presidente electo.
El fallo del juez responde también a las preocupaciones planteadas por los abogados de Trump, quienes argumentaron que la sentencia podría interferir en sus funciones presidenciales.
Merchan ya había refutado esta afirmación, pues aseguró que los actos personales del acusado no están protegidos por la doctrina de inmunidad presidencial: “Vaciar el veredicto del jurado socavaría el estado de derecho de maneras incalculables", escribió Merchan en su decisión.
La fiscalía de Manhattan, liderada por Alvin Bragg, presentó varias alternativas para manejar este caso sin precedentes, incluyendo posponer la sentencia hasta que Trump concluya su mandato en 2029 o cerrar el caso sin confirmar ni anular la condena. Sin embargo, Merchan optó por seguir adelante con la sentencia, con lo cual permite que Trump comparezca de forma presencial o virtual.
El caso se centra en un esquema elaborado por Trump y su equipo para silenciar a Daniels y ocultar los pagos mediante registros financieros falsificados. Michael Cohen, exabogado de Trump y testigo clave, detalló cómo fue reembolsado por estos pagos bajo la apariencia de servicios legales.
Durante el juicio, también se presentó evidencia de otros acuerdos similares realizados para proteger la imagen de Trump durante su campaña presidencial de 2016.
La sentencia, aunque simbólica al no incluir cárcel, mantiene en el registro la condena penal de Trump, una mancha histórica en su carrera. Además de este caso, Trump enfrenta otros procesos legales, aunque la mayoría han sido pausados o desestimados tras su retorno a la presidencia.
Con información de Reuters, ABC News y CBS News.
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